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Ciudad del Vaticano (Miércoles, 09-05-2012, Gaudium Press) El Papa Benedicto XVI recibió el fin de semana, en audiencia privada, un grupo de obispos de la Conferencia Episcopal de los Estados Unidos, que estaban en Roma por ocasión de la visita ‘ad Limina Apostolorum’. En su discurso, el Pontífice trató en profundidad la cuestión de la educación religiosa y la formación en la fe de la próxima generación de católicos norteamericanos.
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| Papa destacó la importancia de la educación de los jóvenes, definiéndola como «el desafío más urgente» |
Conforme el Santo Padre, se debe preservar el gran patrimonio de las escuelas católicas norteamericanas, garantizando sobre todo que «ellas estén abiertas a todas las familias, sea cual sea su situación económica». Según Benedicto XVI, estas instituciones no deben ser solo un recurso fundamental para la nueva evangelización, sino deben ofrecer una importante contribución a toda la sociedad americana, contribución que «debería ser apreciada y apoyada con más urgencia».
El Pontífice solicitó también a los prelados norteamericanos que se preserve la identidad católica de sus instituciones, manteniéndolas fieles «a las propias ideas fundadoras y a la misión de la Iglesia al servicio del Evangelio». Según el Santo Padre, en relación a este punto, hay también mucho por hacer, y, por eso, no se debe alimentar conflictos entre representantes de las instituciones católicas y la guía pastoral de la Iglesia. «Tales divergencias dañan el testimonio de la Iglesia y fácilmente pueden ser usadas para comprometer su autoridad y libertad», alertó.
«Una visión de la armonía entre fe y razón»
Benedicto XVI destacó también la importancia de la educación de los jóvenes, definiéndola como «el desafío más urgente» que los católicos norteamericanos deben enfrentar. En este sentido, exhortó a los prelados a tener en consideración la exigencia de «formar los corazones», «transmitir conocimientos», y de alentar a los estudiantes a alcanzar «una visión de la armonía entre fe y razón capaz de guiar una búsqueda del conocimiento y de la virtud que permanezca para siempre».
Concluyendo su explanación sobre la educación religiosa en los Estados Unidos, el Papa declaró que el éxito de la difusión de los preceptos católicos entre los norteamericanos por las instituciones de enseñanza no se garantice solo por la enseñanza de la religión o por la presencia de una capellanía en algún instituto. De acuerdo con el Santo Padre, se hace necesario, por parte de los profesores, una auténtica «pasión intelectual y un compromiso para integrar fe y vida en una unidad fundamental».
Gaudium Press / Bruno D’Angelo
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