"Medios de comunicación útiles para la conexión, no para la relación": En el Congreso Teológico – Encuentro Mundial de las Familias Milán 2012

Milán (Jueves, 31-05-2012, Gaudium Press) La relación con los nuevos medios de comunicación y los conexos desafíos educativos estuvieron en el centro de un evento de comunicación multimedia e interactivo conducido por el periodista de TV2000 Fabio Bolzetta. En la mesa redonda los relatores -José Luis Restan, especialista de información y director de transmisiones radiofónicas y multimedios, Norberto Gonzales Gaitano, docente de Opinión Pública y Ética de la Comunicación, profesor en la Pontificia Universidad de la Santa Cruz y el profesor Pier Cesare Rivoltella, docente de Didáctica General y Tecnologías de la Educación de la Universidad Católica del Sagrado Corazón- concordaron en decir que la familia no debe abdicar de la propia tarea educativa en favor de la web y las redes sociales, «los medios de comunicación son útiles para la conexión, no para la relación».

La familia debe aceptar todos los días el gran desafío y someter a los medios a un juicio crítico – Foto: Visa Kopu

Un público variado, llenó la gran sala de reuniones plenarias del Mico, envuelto en un evento de comunicación multimedia e interactiva conducido por el periodista de TV2000 Fabio Bolzetta, sobre el tema «Familia y comunicación global, la necesidad de un intercambio de relación». Junto a las intervenciones de los relatores, numerosos testimonios y preguntas del público: algunos videos señalaron los pasajes temáticos y muchos estímulos llegaron de la «red» internet de Facebook y Twitter. Así se construyó un significativo tiempo de reflexión y examen sobre los grandes temas que la comunicación global y la utilización de los instrumentos tecnológicos comportan para la vida de las personas y las familias.

No se puede dejar a los medios la tarea educativa de la familia

¿Cuáles los mayores problemas de educación y comunicación con los jóvenes? ¿Cómo regular la utilización de todos los medios de conexión al que todos y los más jóvenes tienen acceso? «A lo heterogéneo de los medios de comunicación tenemos que pedir humildad y realismo, porque con frecuencia nos trasmiten una realidad falsificada», dijo José Luis Restan, especialista de información y director de programas de radio y multimedia. No se debe dejar a los medios la tarea educativa que compete a la familia, teniendo también en vista las situaciones de debilidad y fragilidad que frecuentemente la connotan hoy. Permanece para la familia el deber de transmitir el buen sentido de la vida, que no se puede esperar de las más populares y difundidas transmisiones mediáticas.

Percibimos que los medios pueden ser un soporte para el crecimiento de los hijos -concordaron diversas intervenciones latinoamericanas- sin embargo queremos ser un sujeto vivo de la comunicación y damos importancia a la relación humana, al compartir en casa, con los amigos y fuera, porque el contacto virtual no puede substituir a aquel personal. «Usar los medios de comunicación como factor de relación y no de solo conexión: facebook crea ‘red’, pero no comunidad, desde que las personas no decidan hacer comunidad. No hacer de la red un substituto del testimonio personal -resaltó Norberto Gonzales Gaitano, docente de Opinión Pública y de Ética de la Comunicación- y mucho menos de la catequesis; se pueden seleccionar fuentes alternativas sobre la información religiosa, para no ser manipulados por visiones e informaciones parciales y equivocadas».

Se trata por tanto de preparar padres e hijos para «decodificar los medios» y las soluciones clásicas de cómo educar para los medios de comunicación en familia no funcionan más: tenemos los medios ahora siempre a mano y nos es permitido tener acceso a la «red» en cualquier lugar. A los padres falta el tiempo para intervenir: es un hecho debido a los ritmos frenéticos de nuestro vivir. ¿Qué hacer? «Menos control, más gobierno -sugiere Pier Cesare Rivoltella, docente de Didáctica general y Tecnologías de la educación- donde el gobierno significa sabiduría, equilibrio y serenidad de relación, mientras el control evidencia temor e inadecuación. La palabra clave es responsabilidad».

Los jóvenes deben entender que hay que colocar en discusión lo que aprenden a través de las nuevas tecnologías. La familia debe aceptar todos los días el gran desafío y someter a los medios a un juicio crítico.