Nueva York (Viernes, 01-06-2012, Gaudium Press) La organización Women’s Rights in China (WRC) organizó, el pasado 29 de mayo, un encuentro de ciudadanos chinos en Nueva York sobre las consecuencias y abusos de la política de un solo hijo por familia impuesta por el Gobierno chino y que constituye una seria violación a la libertad de sus ciudadanos. Esta política, en ejercicio hace más de 30 años, es la causa de numerosos abortos forzosos y esterilizaciones, pero también el origen de una idea alterada de familia que afecta estructuralmente la sociedad china.
Los ciudadanos chinos manifestaron su preocupación sobre las consecuencias de las políticas anitnatalistas. |
Varios activistas residentes chinos fueron invitados al encuentro, pero el gobierno les negó el permiso de salida. Entre ellos se cuenta Yang Zhizhu, un profesor universitario de Beijing que perdió su trabajo por haber concebido un segundo hijo con su esposa sin autorización del gobiernos. En su discurso, leído en su ausencia, denunció los interrogatorios a los que ocasionalmente se somete a las mujeres embarazadas por parte de funcionarios chinos que desean establecer si verdaderamente ése es su primer niño.
Ma Jian, escritor chino radicado en Gran Bretaña, expuso los casos que encontró al entrevistar a víctimas de la política de un solo niño por familia para la redacción de una novela. Relató que encontró familias que debían vivir en basureros o en barcas adaptadas como vivienda para evitar un aborto forzado o una multa considerable por su segundo hijo.
Ma, padre de cuatro hijos, se mostró indignado por esta situación que afecta incluso a los altos cargos gubernamentales, que normalmente se reservan ciertos privilegios. «Es extremadamente raro que una política sea tan penetrante en China». La propaganda estatal al respecto es abundante y se encuentran calles completas, según afirmó el escritor, llenas de publicidad con lemas como «un niño, una familia feliz».
Ese modelo impuesto de familia ha trasformado negativamente la sociedad china: «Una foto de una familia china actual incluiría un padre y una madre, un solo hijo – probablemente varón – sin hermanos ni hermanas, tal vez un tío o tía y eventualmente un primo», describió Ann Noonan, directora ejecutiva de U.S. International Broadcasting, la única ponente norteamericana en el evento. «La política de un solo hijo por familia ha cambiado por completo la familia china».
«Todos los embarazos deben ser autorizados legalmente», denunció Noonan. La preferencia por los hijos varones, combinado con el antinatalismo gubernamental creó «una desproporción enorme» en la cantidad de hombres con respecto a las mujeres. Esta situación de imposición y minoría se traduce en casos de «angustia extrema» sobre la cual las mujeres no pueden discutir. La activista denunció altas tasas de suicidio femenino juvenil en el país asiático.
Finalmente, Noonan criticó el apoyo económico que la administración Obama devolvió al Fondo de Población de las Naciones Unidas, que ha apoyado desde su inicio la política china de un solo hijo por familia y cuyo respaldo, según denunciaron asistentes al encuentro, es usado como arma ideológica de los funcionarios para continuar la imposición de la medida en la población.
Con información de CNR
Deje su Comentario