Episcopado Español responde 10 preguntas sobre financiación y fiscalidad de la Iglesia

Madrid (Lunes, 04-06-2012, Gaudium Press) Bajo el título «10 preguntas, 10 respuestas sobre la financiación y fiscalidad de la Iglesia», la Conferencia Episcopal Española (CEE) respondió la semana pasada a algunas críticas que la Iglesia Española viene recibiendo de algunos sectores que dicen que ella goza de «ciertos privilegios», porque «no paga impuestos» y vive en un «paraíso fiscal».

El documento, que ha sido dado a conocer por el Episcopado Español también con la finalidad de responder de modo coherente y conciso a preguntas que plantean con frecuencia los ciudadanos, resuelve indagaciones como: «¿El Estado financia a la Iglesia?», «¿El Patrimonio de la Iglesia es un tesoro económicamente rentable?», «¿Cáritas no es la Iglesia?», «¿La Iglesia no paga el IBI (Impuesto sobre Bienes Inmuebles)?», además de otras.

La Iglesia si paga IBI por todos aquellos bienes que no están amparados por la ley de mecenazgo; aclara la CEE.

Entre las respuestas que ofrece la CEE, el documento explica que para el sostenimiento de la Iglesia ella «no recibe nada de los Presupuestos Generales del Estado», puesto que con la Declaración de Renta anual los contribuyentes eligen voluntariamente poner la «X» a favor de la labor del a Iglesia, lo que supone -como dice el texto- «aproximadamente un 25% del total de la financiación de la Iglesia».

Sobre el tema, el escrito también explica: «El artículo 16 de la Constitución Española de 1978 establece que los poderes públicos ‘mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia católica y las demás confesiones'», y que el Acuerdo sobre Asuntos Económicos entre la Santa Sede y el Estado Español, de enero de 1979, estableció que «el Estado se compromete a colaborar con la Iglesia Católica en la consecución de su adecuado sostenimiento económico, con respeto absoluto del principio de libertad religiosa'», aclarando que «cooperación y colaboración no es financiación directa, ni subvención».

En este sentido, el documento también dice que «la Iglesia le ahorra dinero al Estado», tomando el ejemplo de los datos del gasto público del Ministerio de Educación en 2009, donde se señala que la Iglesia le ahorró al Estado 4.399 millones de euros.

El IBI; punto álgido de crítica

Entre los temas ante los cuales la Iglesia ha tenido que salir a responder frente a algunas críticas ha sido referente al Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI). Al respecto algunos críticos dicen que la Iglesia debería renunciar a su «excepcional privilegio» y pagar este impuesto.

En relación con el tema, el Episcopado Español recuerda que es falso afirmar que la Iglesia no pague el IBI señalando que ella aporta al impuesto por medio «de todos los inmuebles que no están exentos por ley».

Dice además, que es falso afirmar que la Iglesia es la única que, en algunos casos, está exenta del pago del IBI, puesto que -como se expone en el texto- por la Ley de mecenazgo (ley 49/2002), tampoco lo pagan, entre otras, «las Fundaciones, las Asociaciones de utilidad pública, las federaciones deportivas, los partidos políticos, los sindicatos, las iglesias evangélicas, las comunidades hebreas y musulmanes».

Y explican que esta exención «se trata de una medida de incentivo fiscal con la que el Estado reconoce las actividades de interés general que realizan muchas instituciones», puesto que es lógico «que el Estado promueva e incentive a quienes trabajan a favor del bien común».

Sobre este tema, en un artículo anterior difundido por la CEE, Fernando Giménez Barriocanal, Vicesecretario General para Asuntos Económicos del Episcopado Español, aclara que la Iglesia si paga IBI por todos aquellos bienes que no están amparados por la ley de mecenazgo tales como parkings, restauración, explotaciones agrarias, entre otros.

Para leer el documento completo se puede ingresar aquí.

Con información de la Oficina de Información de la Conferencia Episcopal Española (CEE), ABC, y Diario Vasco.