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Harbin (Jueves, 28-06-2012, Gaudium Press) La Iglesia Católica en China celebra la decisión de las autoridades de aplazar el nombramiento de un obispo ilegítimo que estaba programado para el próximo 29 de junio y que significaría una grave afrenta contra el Santo Padre, en la solemnidad de San Pedro y San Pablo.
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| Los fieles católicos en Harbin, China, manifestaron su unidad en oposición a la ordenación ilegítima de un obispo. |
La noticia llega apenas un día antes de la ordenación, que había generado una situación de tensión y de oposición generalizada entre los católicos, quienes decidieron no cooperar en los preparativos y dedicar tiempos de oración y ayuno para pedir que la ceremonia no se realizara (ver nota anterior).
Monseñor Savio Hon Taifai, Secretario de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, había advertido en declaraciones concedidas a Asia News que la ordenación del padre Joseph Yue como obispo era una acción contraria a la comunión con el Papa. De suceder, un hecho de esta naturaleza «hiere a toda la Iglesia y especialmente la Iglesia en China. Hiere incluso al Santo Padre porque este gesto usurpa el poder apostólico del Papa», manifestó el prelado. «Este poder fue dado a Pedro y sus sucesores por el mismo Señor. El nombramiento de obispos toca el corazón de la Iglesia. Algo así nunca debería suceder».
Mientras las autoridades manifestaron que la ordenación queda pospuesta «solamente hasta el mes siguiente», los católicos no pierden la esperanza de obtener de Dios una solución definitiva. «Nuestra gente continuará orando y ayunando para que la ordenación sea cancelada permanentemente», afirmó un sacerdote local a Asia News, quien además aseguró que el aplazamiento fue producto de la unidad de la Iglesia en Harbin.
Con información de Asia News
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