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Cebú (Lunes, 16-07-2012, Gaudium Press) Con una reunión especial en Fuente Osmeña, presidida por el Arzobispo de Cebú, Mons. José Palma, la Iglesia en Filipinas marcó el inicio de la cuenta regresiva para la canonización del beato Pedro Calungsod, programada para el próximo 21 de octubre. Al evento, precedido de una solemne Eucaristía en la Basílica del Santo Niño, asistieron sacerdotes, religiosos, estudiantes y miembros de organizaciones católicas, y con oración y fuegos artificiales se señaló el inicio de los «100 días de gracia».
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«Estos son días de gracia y favores para toda la comunidad cebuana y para todo el país», expresó en su homilía el Cardenal Ricardo Vidal, Arzobispo emérito de Cebú. «Debemos no sólo ocuparnos en los preparativos, sino que la preparación debe también purificarnos, acercarnos más. Los cien días deben ser un tiempo de gracia para todos».
El registro del apostolado y martirio del próximo santo «podría resumirse en un párrafo o dos», según el Cardenal, «pero el significado llenaría muchos libros». El prelado explicó que el joven misionero pudo haber huído de sus victimarios, pero eligió enfrentar la muerte para dar gloria a Dios. «No importa que tan idealista la gente joven pueda ser, si no pueden soportar la inconveniencia y la incomodidad, no podrán practicar la solidaridad».
El lugar exacto de nacimiento de Pedro Calungsod es deconocido, pero se cree que tuvo lugar en la provincia de Cebú, en Filipinas. Fue educado por los padres Jesuitas y se hizo misionero catequista siendo apenas un adolescente. Fue uno de los primeros enviados a la misión organizada por el P. Diego de San Vitores en las Islas Marianas, en el Pacífico occidental, en 1668. El día 02 de abril de 1672, fue asesinado a espada en Tumhon, Guam, por evangelizar a los nativos.
Con información de UCA News e Inquirer News
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