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Ciudad del Vaticano (Miércoles, 01-08-2012, Gaudium Press) Falta un año para la apertura de la Jornada Mundial de la Juventud en Río de Janeiro. El Papa también está a la espera del encuentro con los jóvenes, y lo expresó públicamente el domingo pasado en el Ángelus. El símbolo más significativo para los jóvenes de todo el mundo en esta primera Jornada brasileña será sin duda la estatua del Cristo Redentor, en el Corcovado, el monumento más conocido del país.
Recientemente, de la biblioteca apostólica vaticana, salió en inglés, un libro curado por Sandra Philips con el título «The Papal Collection of Photographs in the Vatican Library» (Colección Papal de Fotografías en la Biblioteca Vaticana – BAV) que trae en la tapa dos fotografías de la construcción de la estatua del Cristo Redentor en Río de Janeiro. Son una parte de la gran colección papal guardada dentro de las paredes leoninas del Gabinete de los Grabados de la BAV y por primera vez presentadas en un libro.
En 1930 llegó al Vaticano para el Papa Pío XI, una carta, y un álbum de fotos en formato A4, de color blanco crema, con 14 fotografías junto a un pequeño modelo en plástico. Con ellos la diócesis de Río de Janeiro documentó al Santo Padre sobre los trabajos de construcción de la estatua del Cristo Redentor del Mundo, el día 20 de junio de 1930. Un proyecto extraordinario, grande y original.
Entre las fotos hay algunos detalles, como el de un monseñor al lado de los dos grandes dedos de Jesús, y de la estatua toda en construcción todavía con el armazón, los andamios. Hay también fotos de reconstrucción, de día y de noche de la vista sobre el panorama de Río con la nueva estatua «como quedará». Cada página presenta una fotografía única, todo precede un pergamino con los detalles sobre las medidas de la estatua.
Entre las fotos de la colección del Gabinete de Grabados de la BAV hay también otras de Río de Janeiro y de Brasil. Hay dos bellos álbumes rojos con decoraciones doradas. El primero es del Jubileo de 1877 bajo el pontificado de Pío IX y contiene las reproducciones de las fotos de Río de Janeiro – regalo dado al Santo Padre por los peregrinos brasileños.
El otro es aún más antiguo, es un regalo a León XIII de los obreros católicos de las empresas de construcción ferroviaria ‘S.P.Railway Co.’ por ocasión del Jubileo Papal en 1887. Las fotografías fueron tomadas por un brasileño nacido en Alemania, Pedro Hoenen.
Estos álbumes hoy son para nosotros muy interesantes y curiosos. Son un bello testimonio de tiempos pasados que hablan sobre la historia de la Iglesia en el mundo y sobre la ligación entre los pontífices y la fotografía. Ella se torna, después de su invención, un medio de comunicación en Roma de aquello que sucedía en las diócesis y misiones. Por eso, con las cartas, llegaban también las fotografías que hoy son guardadas en el Gabinete de Grabados de la BAV. Permanecieron en la biblioteca del Papa por el hecho que ellas fueron agregadas a las cartas.
Hoy la Biblioteca apostólica vaticana es una de las más antiguas bibliotecas en el mundo con colecciones y fondos particulares que atraen el interés de estudiosos. La colección fotográfica es uno de los pocos conocidos tesoros. Hace algunos años inició el proyecto de la digitalización del fondo fotográfico de la BAC. Para llegar a un público más amplio, las fotos estarán disponibles para el estudio en la página web www.vaticanlibrary.va. Son fotografías del período 1870-1950.
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