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San Pablo (Jueves, 23-08-2012, Gaudium Press) Conmemorando 98 años de fundación, la Familia Paulina lanzó la revista electrónica ‘Cibercatequese’.
La iniciativa es dirigida a catequistas y agentes de pastorales de todo el Brasil y tuvo su primera edición este lunes 20.
El catequista podrá encontrar en la página «un lugar para profundizar su vocación, adquirir conocimientos sobre la fe y también, para orientarse sobre cómo actuar directamente con los catequizados», dice el editorial de la revista.
La «Cibercatequese» de las Paulinas ofrece contenidos de formación catequística y orientaciones para la vivencia de la espiritualidad, la fe cristiana, guiones para celebraciones y encuentros. En la página también hay un espacio publicitario con informaciones sobre cursos y materiales didácticos de las Paulinas.
La pedagoga e integrante del Núcleo de Catequesis Paulinas (NUCAP), Erenice Jesus de Souza, presenta motivaciones para las catequistas, cómo oír a los niños, cómo utilizar el texto bíblico en un lenguaje de fácil comprensión infantil y cómo presentar a Nuestro Señor Jesucristo como una «persona real» y no un cuento de hadas o personaje de diseño animado.
La misión de catequizar
Mons. Vilson Dias de Oliveira, obispo de la Diócesis de Limeira y presidente de la Comisión para la Animación Bíblico-Catequética, recordó en el mensaje a los catequistas de la Regional Sur 1 de la Conferencia Episcopal Brasileña, sobre la conmemoración del día del catequista de este año (conmemorado el próximo domingo), la misión de llevar a los catequizados a una experiencia de fe amparada en la intimidad con el Señor y en la vivencia comunitaria.
«El catequista es, antes que nada, un discípulo y misionero de Jesucristo. Por eso, busca vivir en su proximidad e intimidad. Nuestra catequesis debe propiciar este encuentro con Jesús a través del compartir la Palabra, los momentos de oración y de la vivencia fraterna. La fe, más que un conjunto de conocimientos es, antes que nada, un encuentro con nuestro Maestro y Señor. Es en esta relación amorosa que los catequizados precisan aprender y vivir».
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