Manila (Miércoles, 05-09-2012, Gaudium Press) El Arzobispo de Lipa, Mons. Ramón Arguelles, rechazó las enmiendas propuestas por los congresistas al proyecto de ley de salud reproductiva en Filipinas, y manifestó que la Iglesia no cede en su posición contra el control artificial de la natalidad. «Es todavía la misma medida con el propósito de reducir la población», denunció el prelado.
Mons. Ramón Arguelles, Arzobispo de Lipa. |
Entre las propuestas de enmienda, que tienen como objetivo persuadir la fuerte oposición al proyecto, se incluye la eliminación del acceso universal a los anticonceptivos para proveerlos únicamente a los pobres. «Convertiremos la ley en una medida contra la pobreza», afirmó el congresista Neptali González. Como era de esperarse, en lugar de aliviar la preocupación de la Iglesia esta nueva postura motivó un nuevo rechazo.
«Tomar medidas contra la pobreza está bien, pero (en ese caso) se eliminaría la pobreza matando a los pobres. Eso no es justo», afirmó Mons. Arguelles. «Por ejemplo, dicen que hay muchas personas pero menos comida. Entonces preocúpense por los campesinos». El Arzobispo hizo notar cómo las políticas de fomento agrario sería una forma efectiva de atacar el problema sin comprometer la vida de los ciudadanos.
La Iglesia no se deja engañar por las maniobras políticas, según explicó Mons. Arguelles. «Lo que sea que hagan con esa ley de salud reproductiva, cualquiera que sea su explicación, en realidad desean implementarla porque nos está siendo impuesta por aquellos a quienes les gustaría eliminarnos», denunció.
De igual forma, el P. Melvin Castro, Secretario Ejecutivo de la Comisión sobre Familia y Vida de la Conferencia de Obispos Católicos de Filipinas descartó la participación de los Obispos en un «grupo técnico de trabajo» que fue propuesto para discutir aspectos controversiales de la ley.
«No hemos recibido ninguna invitación para ser parte del grupo pero, hasta donde sé, no vamos a participar», indicó el presbítero. «Si participamos, nuestra preocupación es que puedan decir que la Iglesia está abierta a ceder en su aprobación. Eso es lo que estamos tratando de evitar».
De todas formas, el P. Castro indicó que, de ser necesario, la Iglesia podría enviar laicos expertos, aunque prefiere dejar esos trabajos a los legisladores que se oponen al proyecto, quienes conocen mejor las dinámicas de trabajo de este tipo de grupos.
Con información de CBCP News.
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