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São Paulo (Lunes, 11-05-2009, Gaudium Press) La ONU (Organización de las Naciones Unidas) denunció este lunes la muerte de más de cien niños en los enfrentamientos de este fin de semana entre la guerrilla separatista tamil (LTTE, Tigres de Liberación de la Patria Tamil) y el Ejército del Sri Lanka en el último reducto rebelde, al norte de la isla, donde se refugian millares de civiles. Rebeldes y tropas del gobierno intercambian acusaciones por las muertes y ONU lamenta que enfrentamientos se hayan transformado en «baño de sangre».
Datos de la ONU indican que en el último mes cerca de 6.500 civiles fueron muertos como consecuencia de la renovación de los esfuerzos del gobierno en la guerra.
«Nosotros hemos alertado insistentemente contra un baño de sangre y la muerte de civiles en larga escala, incluyendo más de cien niños en este fin de semana, parece mostrar que el baño de sangre se tornó una realidad», dijo el porta-voz de la ONU, Gordon Weiss.
El número de civiles muertos por el conflicto, de acuerdo con un médico del gobierno, es de al menos 430 solamente en este fin de semana, pero la guerrilla separatista dice que más de 3.200 civiles murieron desde el domingo a la tarde en un «genocidio» promovido, según los rebeldes, por el Ejército.
El área de enfrentamiento, en el norte de Sri Lanka, es prohibida a periodistas y por eso no hay confirmación independiente del número de muertos. Hace meses, tropas cingalesas y los rebeldes intercambian acusaciones de que el rival mató civiles y lanzó ataques a hospitales y albergues.
Con el número cada vez mayor de víctimas de la guerra civil, una alianza de grupos internacionales de derechos humanos pidió que el Consejo de Seguridad de la ONU realice reunión urgente sobre el enfrentamiento.
Artillería
De acuerdo con un médico de las áreas controladas por los tamiles, ataques de artillería dejaron centenas de muertos e hirieron más de mil personas sólo en este domingo. El ataque fue el más sangriento contra civiles de la etnia tamil desde que la guerra se intensificó nuevamente, hace más de tres años. Fuentes médicas en la zona del conflicto informaron que los hospitales están llenos y que el número de muertos debe aumentar.
Según el médico V. Shanmugarajah, que trabaja en un hospital dentro de la zona de guerra, 393 cuerpos fueron traídos al hospital o murieron en el local. Otros 37 cuerpos fueron traídos este lunes.
Tensión
La tensión que explotó en los últimos meses entre la mayoría cingalesa de Sri Lanka y la minoría tamil se manifestó de forma clara después de la independencia del país de dominio británico, en 1948. Los Tigres Tamiles surgieron en 1976, para luchar por la creación de un Estado independiente al norte del país, alegando defender el derecho de las minorías tamiles delante de la opresión de sucesivos gobiernos de la mayoría cingalesa.
Según datos del Censo de 2001, en aquel año había 1,8 millón de tamiles en Sri Lanka, 8,5% de los 21 millones de habitantes del país.
La guerra abierta entre el grupo y el gobierno explotó en 1983 y mató decenas de millares de personas en dos décadas. Los dos lados firmaron un acuerdo de cesar-fuego, en febrero del 2002, pero la violencia volvió en 2006, y el gobierno recuperó el control de la Provincia Oriental, en 2007. En enero del 2008, el gobierno suspendió oficialmente el cesar-fuego. Según el gobierno, el objetivo es acabar con el grupo rebelde y encerrar la guerra civil en Sri Lanka.
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