Aparecida (Viernes, 26-10-2012, Gaudium Press) En su retorno al Brasil después de participar de la apertura del Año de la Fe en el Vaticano, el Cardenal Arzobispo de Aparecida y Presidente de la CNBB, Mons. Raymundo Damasceno Assis, ofreció declaraciones en las que habló sobre la Nueva Evangelización y el Sínodo de los Obispos que ocurre desde el 7 y está próximo a concluir.
Diversos representantes de la Iglesia Católica de los 5 continentes participan de la 13ª Asamblea Ordinaria del Sínodo de los Obispos. Juntos, los integrantes de la Asamblea discuten e intercambian experiencias sobre la ‘Nueva Evangelización para la transmisión de la Fe’.
«Son intercambios de experiencias para ver cómo llevar el Evangelio de Jesucristo a las personas que ya fueron evangelizadas, como es el caso del continente Europeo y de América Latina, pero que muchas veces, ya se alejaron de nuestras comunidades, ya no se dejan influenciar por el Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo y ya no participan de la vida sacramental. A esos cristianos, nosotros precisamos llevar nuevamente el Evangelio para que ellos puedan redescubrir la belleza de la fe. Para que una vez evangelizados ellos puedan también tornarse evangelizadores» afirmó Mons. Damasceno.
Sobre los desafíos de la evangelización del siglo XXI, Mons. Damasceno habló del valor que hoy la Iglesia da a los medios de comunicación:
«Nosotros no podemos dejar de usar todas las técnicas modernas de comunicación, el internet, la radio, los blogs, el Twitter y así sucesivamente. Todas esas herramientas son meros instrumentos que Dios nos dio a través de nuestra inteligencia y de nuestro trabajo para que ellos estén al servicio de causas justas y buenas. No hay duda que la razón de ser de la Iglesia es llevar el Evangelio a todas las personas, por tanto ella se sentiría culpable delante de Dios si no usase esas modernas tecnologías para llevar el Evangelio y llevarlo a todas partes».
Los jóvenes también son tema relevante durante el Sínodo, destacó Mons. Damasceno. «De aquí a 20, 30 años, probablemente la población de Brasil y de América Latina no sea de mayoría de jóvenes, por tanto, es el momento oportuno para llevar el Evangelio a la juventud», concluyó el Cardenal Presidente de la CNBB.
Con informaciones de A-12.
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