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Manila (Miércoles, 28-11-2012, Gaudium Press) La controversia desatada en Filipinas por el proyecto de ley de Salud Reproductiva – una agresiva campaña de promoción de la anticoncepción en los sistemas de salud y de educación del país – llegó a uno de sus puntos más altos. Tras el reiterado rechazo de los Obispos, principales opositores a la iniciativa (ver nota anterior), y la resolución del poder ejecutivo y los legisladores de buscar su aprobación a toda costa, la discusión tocó un punto neurálgico: la apropiación que los católicos tienen de la Doctrina de la Iglesia y su expresión en la vida pública a través del derecho al voto.
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| Multitunidarias manifestaciones lideradas por la Iglesia han expresado el rechazo ciudadano al proyecto de ley de Salud Reproductiva. |
La advertencia la realizó el Obispo de Isabela de Basilan, Mons. Martin Jumoad, quien afirmó que el tema del control natal es serio y que si los Obispos promueven una campaña sobre la inconveniencia de elegir a quienes promuevan este tipo de leyes, «creo que podríamos generar un voto católico», advirtió. El prelado destacó la importancia del respeto a la santidad de la vida, que amerita una acción concreta de los católicos. «Si afecta la Doctrina de la Iglesia, tenemos que levantarnos», exhortó el Obispo. Esta posición fue difundida por el servicio informativo de la Conferencia de Obispos Católicos de Filipinas con un titular bastante llamativo: «No nos subestimen».
Las declaraciones suscitaron fuertes reacciones entre los legisladores, como la de la Senadora Miriam Defensor – Santiago, quien aseguró que el llamado «voto católico» es un «mito político» y que cualquier intervención de los Obispos en esta materia sería inconstitucional. Su posición fue cuestionada por el Arzobispo de Lipa, Mons. Ramón Arguelles, quien aseguró que, exista o no un «voto católico» consolidado, los Obispos deben seguir oponiéndose a las iniciativas contrarias a la moral. «Lo que ellos creen un mito hoy puede ser una realidad mañana», afirmó. «Estamos motivando a los buenos católicos y ya hay quienes están respondiendo a nuestro llamado».
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| «Se requieresn nuevos líderes que respeten el valor de la vida», manifestó el Arzobispo de Lipa. |
Mons Arguelles recalcó que los Obispos no toman parte en las contiendas electorales, por lo cual «quienes realizan estas campañas deben ser organizaciones de laicos», responsables de trabajar por el bien de la sociedad y de generar «una mejor alternativa». Los prelados, afirmó, se limitan a educar la conciencia de los fieles y son estos últimos quienes actúan en la esfera política. «Le pedimos a las personas preservar las enseñanzas de la Iglesia (…) y la moralidad que tenemos como cristianos». Por este motivo, los Obispos «no decimos que voten por un candidato», explicó, pero sí señalan cuando una iniciativa contradice los valores cristianos.
Otros Obispos del país han expresado esta misma inquietud y su compromiso por informar mejor a los fieles sobre las realidades que preocupan a la Iglesia. Tal es el caso del Obispo de Sorsogon, Mons. Arturo Bastes, quien informó el pasado 26 de noviembre que ya hay organizaciones católicas católicas preparando una campaña de información sobre los políticos y sus posturas en favor o en contra de la ley antinatalista. «Ya le he hablado a mis sacerdotes sobre esto», comentó el prelado.
El Arzobispo Arguelles comentó que esta respuesta de los católicos es espontánea, «porque es el llamado del momento. Exista o no una postura oficial, va a estar ahí». La presente controversia sobre el proyecto de ley antinatalista evidencia en su opinión que los dirigentes del país no resuelven los males del país y se requieren nuevos líderes que respeten el valor de la vida. «Es hora de que hagamos algo. Creo que es un asunto de nuestro compromiso religioso», concluyó.
Con información de CBCP News.
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