Jaén (Viernes, 30-11-2012, Gaudium Press) Con motivo del Año de la Fe y respondiendo a la invitación que hizo el Santo Padre Benedicto XVI en la Carta Apostólica «Porta Fidei» de «recorrer la historia de nuestra fe», la diócesis de Jáen en España está organizando la ruta religiosa y cultural «Tras las huellas de los testigos de la fe».
La iniciativa, que es organizada por la Vicaría Episcopal del Sector Fe- Cultura, tiene por objeto acercar a los participantes con la historia de la santidad en la Iglesia particular de Jaén.
Para el Vicario Episcopal de Fe-Cultura, Don Francisco Juan Martínez Rojas, «esta iniciativa puede ayudar a los miembros de nuestra Iglesia particular de Jaén a conocer mejor las raíces del cristianismo en nuestra tierra y a vivir así mejor su fe», según cita nota de prensa de la diócesis de Jaén.
El primer recorrido, que será el próximo sábado 1º de diciembre, tendrá como tema «Las Primeras Comunidades Cristianas en Jaén», ocasión en la que se recorrerán las localidades de Mengíbar, Arjona, Adújar y Villanueva de la Reina, que están relacionadas con los Santos Eufrasio, Bonoso, Maximiano y Santa Potenciana, así como con uno de los acontecimientos de la historia de la Iglesia en España durante la primera mitad del siglo IV, que fue el Concilio de Elvira.
La diócesis de Jaén anunció que próximamente dará a conocer las fechas de los próximos recorridos que tendrán lugar durante el 2013.
«Recorrer la historia de nuestra fe»
El Papa Benedicto XVI en la carta Apostólica «Porta Fidei» -con la que convocó al Año de la Fe -, invitó para que durante este tiempo de gracia los fieles conozcan y recorran la historia de la fe: «A lo largo de este Año, será decisivo volver a recorrer la historia de nuestra fe, que contempla el misterio insondable del entrecruzarse de la santidad y el pecado. Mientras lo primero pone de relieve la gran contribución que los hombres y las mujeres han ofrecido para el crecimiento y desarrollo de las comunidades a través del testimonio de su vida, lo segundo debe suscitar en cada uno un sincero y constante acto de conversión, con el fin de experimentar la misericordia del Padre que sale al encuentro de todos».
Con información de la Diócesis de Jaén.
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