Ciudad del Vaticano (Miércoles, 05-12-2012, Gaudium Press) En la conferencia de prensa de presentación del próximo Congreso Internacional «Ecclesia in America» a desarrollarse los próximos días 09 al 12 de diciembre, el Cardenal Marc Ouellet, Presidente de la Pontificia Comisión para América Latina, habló del sentido de este evento e hizo un balance de la situación de la Iglesia en el continente.
Cardenal Marc Ouellet. |
«La valiosa herencia de la fe cristiana, que está en el origen del «Nuevo Mundo» americano e inspira la vida de sus gentes, está ahora sujeta a la erosión causada por las oleadas de secularización», advirtió el Cardenal Ouellet. El prelado denunció que una cultura global hostil a las manifestaciones religiosas impacta el continente y exige que la fe «sea revitalizada».
Para lograr este objetivo, la Pontificia Comisión busca generar el espacio de encuentro entre las Iglesias locales, cuyo fortalecimiento y unidad «seguramente serán fructíferos y gratificantes». Un aspecto llamativo notado por el Cardenal Ouellet es que ese intercambio «ya se ha venido dando en el providencial «laboratorio» creado por la cada vez más importante presencia hispana en Estados Unidos y Canadá».
Los retos de los pueblos de América (del Norte, Central y del Sur) deben ser enfrentados «a la luz de la misión de la Iglesia», expresó el Cardenal, y para ello se busca «cooperar en la creación de redes de amistad a través del continente con un sentido leal de pertenencia a la Iglesia». En este contexto, el Presidente de la Pontificia Comisión manifestó que se requiere unidad para tener influencia misionera y social, y esta unidad se encuentra en la «confianza y devoción al Sucesor de Pedro, Pastor universal, primer testigo y garante de la unidad y la comunión». Es por este motivo, señaló, que el encuentro se organizó en el Vaticano.
Entre los desafíos de la Iglesia en América sobre los cuales se reflexionará a la luz de la exhortación «Ecclesia in América», el Cardenal Ouellet señaló el tema de la inmigración, los problemas asociados al narcotráfico, la violencia y la pobreza. También denunció que «la cutura de la vida y la institución de la familia están gravemente amenazadas» en el continente y que existe una preocupación general por defensa y promoción de la libertad religiosa.
El Congreso Internacional, afirmó finalmente el Cardenal, resalta el «cuidado universal» que la Santa Sede tiene por las Iglesias locales que representan «más del cincuenta por ciento de los católicos en el mundo».
Con información de Vatican Information Service.
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