Menú 
Kampala (Lunes, 17-12-2012, Gaudium Press) En la mañana de jueves pasado, durante la celebración eucarística que presidió en la catedral de la Diócesis de Arua, por ocasión del centenario de evangelización de la circunscripción eclesiástica, el prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, Cardenal Fernando Filoni, hizo una exhortación a los fieles laicos de la prefectura eclesiástica de Gulu, al norte de Uganda:
 |
| Cardenal Fernando Filoni |
«No puedo dejar de expresar a ustedes, queridos hermanos y hermanas, todo mi aprecio por el servicio que prestan tan bien a Cristo y a la Iglesia mediante la enseñanza del catecismo, por su cariñosa apertura a los más necesitados, la educación de los jóvenes, la promoción de la reconciliación entre las familias o grupos divididos, por la asistencia a los ancianos, ayuda en las parroquias y por la ayuda en las liturgias dominicales; en suma, por su dedicación mediante toda forma de apostolado y de animación misionera. Sean siempre hombres de bondad, de reconciliación, de santidad de vida cristiana y de paz».
Otras circunscripciones que componen la provincia eclesiástica de Gulu, que recientemente celebraron este centenario, se unieron a la fiesta jubilar de Arua.
Saludando a los obispos y los sacerdotes presentes, el Cardenal agradeció por la invitación a «participar de este Centenario de evangelización de esa tierra bendecida, donde santos misioneros, religiosos y religiosas, dedicaron su vida al nacimiento de esta Iglesia en Arua».
«No podemos permitir que este Centenario especial pase sin detenernos a reflexionar, a rezar y a agradecer a Dios con un sentido de gratitud por todos aquellos que trajeron el Evangelio a este lugar. Somos herederos de aquella gran obra de evangelización que ahora está en nuestras manos», afirmó.
El purpurado continuó en su homilía diciendo: «Nosotros, que amamos el Bautismo que recibimos, tenemos el deber sagrado de continuar el trabajo de ellos, cada uno según el llamado y la gracia que Dios nos confió, como obispos, sacerdotes, personas consagradas y fieles laicos».
El Cardenal Filoni se detuvo, en particular, en una reflexión sobre el tiempo litúrgico del Adviento: «Al inicio de cada nuevo ciclo anual la sagrada liturgia invita a la Iglesia a renovar su anuncio divino a todos los pueblos, y lo resume en dos palabras: ‘Dios viene’… No está en el pasado (Dios vino), ni en el tiempo futuro (Deus vendrá). Está en presente: ‘Dios viene’ «.
«Es un regalo continuo, esto es, un acto siempre continuo: sucedió, está sucediendo ahora, y sucederá también en el futuro. En todos estos momentos ‘Dios viene’ «, explicó el prefecto de Propaganda Fide.
Proclamar simplemente esas dos palabras equivale a anunciar a Dios mismo, que es esencialmente el «Dios-que-viene». El tiempo de Adviento invita a todos los fieles a tornarse más conscientes de esa verdad y a actuar consecuentemente, destacó. (JS)
Con informaciones de la Radio Vaticana.
Deje su Comentario