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El Cairo (Domingo, 13-01-2013, Gaudium Press) El cardenal Leonardo Sandri, Prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales, realizó una visita a Egipto del 06 al 11 de enero pasados y exhortó en un encuentro con los agentes de apostolado del país el trabajo de «apoyo y la defensa de aquellos cristianos a quienes no se les reconoce la libertad religiosa». Las palabras del Cardenal son especialmente significativas en la coyuntura actual, cuando Egipto adoptó una constitución confesional islámica que señala la Sharia (ley religiosa) como fuente de la ley.
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| Cardenal Leonardo Sandri |
El Prefecto dirigió su mensaje a los responsables de las actividades apostólicas, agradeciendo su labor y compromiso «para que la vida de la comunidad católica en Egipto, sepa anunciar con eficacia al Hijo de Dios a través de la vida sacramental, la catequesis, la caridad, especialmente en la asistencia y la educación y en el servicio concreto y diario de tantos hermanos y hermanas».
«Sin lugar a dudas estáis experimentando el desierto de la difícil situación actual», expresó el Cardenal Sandri, quien llamó a los agentes de pastoral a mantener una vida de oración, a ejemplo de Jesús. Este vivir en contacto con Dios hace «que la fe se vigorice mientras experimenta la belleza de la amistad con Dios, a pesar de las graves preocupaciones que el tiempo presente reserva a los cristianos de Oriente Medio y también a vuestra querida patria».
Tras recordar la acción caritativa de la Iglesia Católica en Egipto y el logro que representa la construcción de un templo en Sharm El Sheik, el Card. Leonardo Sandri manifestó su deseo por conservar la tradición de Egipto, «una cultura siempre abierta a la revelación de Dios». Para ello pidió continuar trabajando para evangelizar la cultura en un trabajo conjunto de las organizaciones que llevan a cabo la actividad misionera.
El Año de la Fe, explicó finalmente, es la oportunidad para «compartir la misión de la Iglesia con todas las gentes», y fomentar un impulso misionero renovado. Para este año, manifestó el Prefecto, «deseamos la confirmación de la presencia eclesial en el mundo, con el debido apoyo y la defensa de aquellos cristianos a quienes no se les reconoce la libertad religiosa. A todos, sin distinción, y, por lo tanto, también a los cristianos, se debe garantizar la profesión del credo propio».
El prelado concluyó con un llamado a «tantos cristianos cansados e indiferentes para que vuelvan a descubrir la alegría de Cristo y regresen a Él para tener la vida eterna y verdadera». El Card. Sandri, durante su visita apostólica, sostuvo encuentros con los Obispos católicos y con los Patriarcas ortodoxos. También inauguró la iglesia de Nuestra Señora de la Paz en Sharm El Sheik y visitó a las Hermanas Franciscanas del Corazón Inmaculado de María con motivo de su bicentenario y a las religiosas egipcias del Sagrado Corazón, en su centenario de fundación.
Con información de Vatican Information Service.
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