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Santiago (Viernes, 25-01-2013, Gaudium Press) El miércoles 23 de enero, un grupo de reconocidos historiadores chilenos de diferentes casas de estudio se reunieron con el Arzobispo de Santiago, monseñor Ricardo Ezzati, quien acogiendo el llamado del Papa Benedicto XVI de reunir a la Iglesia con intelectuales para razonar y profundizar en la fe, los invitó a dialogar sobre el actual momento que vive la Iglesia.
En la conversación participaron los académicos Freddy Timmermann de la Universidad Católica Raúl Silva Henríquez, Marco León de la U. de Concepción, Fernando Guzmán y Marcial Sánchez ambos de la Universidad Adolfo Ibáñez, María José Castillo, experta en archivística eclesiástica, Edmundo Bustos del Centro de Estudios Complejos y Claudio Rolle de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
«Mirando la historia como un elemento del pasado para entender el presente y proyectarnos hacia el futuro», comentó al salir de la actividad, Marcial Sánchez, recocido académico nacional y director de la «Historia de la Iglesia en Chile»; una publicación que ha rescatado el profundo vínculo del país con la Iglesia Católica y que está pronto a entregar su cuarto tomo.
Para Claudio Rolle, en tanto, «la mirada de la historia permite ver con profundidad de campo los hechos». A su juicio, no hay que temer a los desafíos del presente. «Debemos mirar lo que se tiene, en este caso, el patrimonio de la experiencia de la fe, la historia misma de la Iglesia y con eso construir una proyección hacia el futuro», expresó el académico de la PUC.
Añade que el efecto shock o quedar descolocado al darse cuenta de grandes males, no debiera ser paralizante, «al contrario, debe ser un acicate para actuar mejor, corregir, y sobre todo, pensar que la tarea de servicio continúa», dijo.
Mirar los hechos en perspectiva
Uno de los conceptos que marcó la cita fue el de «profundidad de campo», que posibilita analizar los hechos dentro de un contexto histórico. Permite, por ejemplo, ver que la humanidad completa ha pasado por momentos críticos y ha sabido sobreponerse. «En el caso específico de la Iglesia, esto es una constante. Es una institución divina, pero que llevan adelante hombres y en ese sentido, las debilidades, los momentos de crisis, sirven para hacer aprendizajes, para hacer experiencias y enfrentar el futuro», concluye Rolle.
Y agrega: «La historia debe dar una especie de calma para quienes están angustiados, temerosos o desesperados. Eso es tranquilizador».
Por su parte, Marcial Sánchez, señala que la Iglesia «ha sido capaz de levantarse y dar la cara frente a los acontecimientos». El grupo de estudiosos añade que las crisis se presentan siempre a nivel de la historia y cada una de ellas debe ser asumida en cuanto a su contexto y realidad. «Hoy día la Iglesia chilena está dando luz y muestra en el mundo latinoamericano, de cómo debe ser enfrentada esta situación», manifestó el también profesor de la Universidad Adolfo Ibáñez.
En búsqueda de la Historia de la Iglesia
Actualmente, un grupo de más de 60 personas trabaja intensamente en la escritura e investigación de la historia de la Iglesia en Chile. Estudiosos liderados por el académico Marcial Sánchez, entregarán en junio próximo el cuarto tomo de la publicación «Historia de la Iglesia en Chile», que abordará el periodo entre 1925 y 1960.
Según relata Sánchez, el texto aborda la separación de la Iglesia con el Estado, además de la realidad de las capillas que se comienzan a fundar en el país. «Tenemos que ser capaces de asumir que los elementos del pasado van a ayudar a la construcción del futuro», destaca.
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