sábado, 23 de noviembre de 2024
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Nuevo Patriarca de la Iglesia Católica Caldea asume reto de proteger la libertad religiosa en Oriente Medio

Roma (Martes, 05-2-02-2013, Gaudium Press) La Iglesia Católica Caldea eligió a su nuevo Patriarca durante su Sínodo de los Obispos el pasado 01 de febrero. El Arzobispo Louis Sako, quien durante 10 años presidió la sede de Kirkuk, en Irak, fue elegido por los prelados para esta misión y recibió del Santo Padre la comunión eclesiástica en su nuevo ministerio. El reto más apremiante del Patriarca será la lucha por los derechos de los cristianos en las difíciles condiciones sociales y políticas de Medio Oriente.

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El Santo Padre Benedicto XVI recibe al nuevo Patriarca caldeo, Su Beatitud Louis Sako.

«Apoyo para nuestra libertad religiosa», fue el objetivo señalado por el prelado durante una entrevista a Radio Vaticano sobre los desafíos de su nueva misión. El Patriarca Sako, quien solicitó que no se considere el cristianismo como una religión «de segunda categoría», confesó con humildad su propio temor ante la gran responsabilidad que recibe de Dios.

«Yo dudé y tuve miedo porque el futuro no es claro» reconoció ante los micrófonos de la emisora. «pero estoy listo para servir y entregarme por el beneficio de nuestra Iglesia y de Irak». El nuevo Patriarca tiene experiencia en el diálogo para conseguir el respeto de las comunidades cristianas iraquíes y se espera que su apostolado pueda aliviar la situación de los creyentes en los demás países de la región.

«Esperamos que podamos conseguir esto también en Siria», manifestó a CNA el obispo de Alepo, Mons. Antoine Audo. «Hemos perdido la seguridad en todas partes, especialmente en Alepo. La situación en todo el país está muy mal». Según el prelado, los católicos tienen esperanza en la labor del Patriarca para conseguir el reconocimiento de su libertad religiosa. «Él conoce la situación muy bien porque fue el Arzobispo del pueblo iraquí de Kirkuk durante 10 años», comentó el Obispo.

Su Beatitud, título honorífico a su condición de Patriarca, manifestó que la misión de la Iglesia Católica Caldea tiene es ser en Oriente Medio «un signo de esperanza, de testimonio y de comunión, a pesar de las dificultades, según la invitación y la llamada dirigida a todos nosotros por el Papa Benedicto XVI». Por este motivo invitó a todos los habitantes de la región a trabajar «en defensa de la dignidad humana y la convivencia basada en la igualdad de derechos y obligaciones para todos los ciudadanos».

Con información de Agencia Fides, Radio Vaticano y Catholic News Agency.

 

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