Oración, dice Cardenal O’Malley, es la mayor necesidad en el período anterior al Cónclave

Ciudad del Vaticano (Miércoles, 06-03-2013, Gaudium Press) En entrevista concedida al grupo ACI, el Arzobispo de Boston, Estados Unidos, Cardenal Sean Patrick O’Malley, que será uno de los 115 electores en el Cónclave que escogerá al sucesor de Benedicto XVI, afirmó que «la necesidad más urgente en este momento es la oración para que el Espíritu Santo nos ilumine». Y que eso vale también para todos los católicos ante el inicio del Cónclave.

Cardenal Sean Patrick O’Malley, Arzobispo de Boston

«Tiene que ser como la novena antes de Pentecostés para que el Espíritu Santo se derrame entre nosotros para que podamos encontrar nuestro nuevo Pedro que podrá confirmar nuestra fe y ayudarnos a encontrar el camino que llega al Padre».

«Rezar con mucha fe y buscar cumplir con nuestro deber de ser portavoces del Evangelio, buscar vivir la Nueva Evangelización invitando a otros a seguir a Cristo». Esto es lo más importante que deben hacer los fieles católicos en todo el mundo, dijo el Cardenal.

Mons. O’Malley también resaltó que estos días previos al Cónclave son «muy importantes porque nos dan [a los Cardenales] una oportunidad de conocernos mejor y compartir información sobre la situación de la Iglesia en distintas partes del mundo».

«También nos permiten hablar del gobierno de la Iglesia y de las características que deberíamos buscar en un posible candidato para el papado. Además de eso, están presentes los que tienen más experiencia y una sabiduría que comparten con nosotros que estamos entrando por primera vez en un Cónclave».

El Arzobispo de Boston dijo que el ambiente espiritual de estos días de las congregaciones generales «es como un retiro espiritual. En el primer día de reuniones, oímos una conferencia espiritual del Padre Raniero Cantalamessa (predicador de la Casa Pontificia) porque la atmósfera tiene que ser de oración, de reflexión profunda y de una búsqueda de la voluntad de Dios».

El Cardenal demostró esperanza en la realización de la próxima Jornada Mundial de la Juventud, en Río de Janeiro en la cual se espera que cuatro millones de jóvenes se encuentren con el nuevo Papa. (JS)

Con informaciones y fotos de ACI.