Roma (Viernes, 08-03-2013, Gaudium Press) La Plaza de San Pedro, en el Vaticano, acostumbrada a recibir peregrinos del mundo entero, especialmente para el rezo del Ángelus que cada domingo realizaba el Papa Emérito Benedicto XVI, así como las audiencias generales de los miércoles, cuando éstas no tenían lugar en el Aula Pablo VI, ahora acoge a miles de peregrinos que han llegado a la ciudad de los pontífices para ser testigos de uno de los acontecimientos más importantes de la historia de la Iglesia.
Ellos son los «Peregrinos del Cónclave», quienes desde el pasado 28 de febrero -día de la renuncia de Benedicto XVI-, y con el inicio de la Sede Vacante, han llegado poco a poco a Roma para despedir al Papa Emérito y seguir los sucesos relativos a la elección del nuevo sucesor de Pedro.
Algunos de ellos, que se encuentran en el Vaticano visitanto la Basílica de San Pedro con el objeto de ganar la Indulgencia Plenaria por el «Año de la Fe», convocado por el Papa Emérito, así como visitando los Museos Vaticanos, se quedarán, por ahora, sin conocer la Capilla Sixtina que ha sido cerrada a turistas y peregrinos por causa del Cónclave (ver noticia relacionada).
Algunos de los peregrinos visitan la Basílica de San Pedro para ganar la Indulgencia Plenaria por el Año de la Fe |
Pese a ello, otros han tenido la gran alegría te encontrarse en la Plaza de San Pedro con algún Cardenanal durante los recesos de las Congregaciones Generales.
Como testigos directos también están los «periodistas del Cónclave», quienes minuto a minuto transmiten al mundo los eventos relativos al momento histórico que vive la Iglesia. Entre reporteros, camarógrafos y corresponsales, ya son más de cuatro mil los acreditados por la Sala de Prensa de la Santa Sede.
Aún no se conoce cuántos fieles estarán presentes para el Cónclave en espera de la fumata blanca cuando se anuncie al mundo quien será el nuevo Papa. Se puede preveer que el número de peregrios que lleguen a la Plaza de San Pedro superarará los cien mil, tal como ocurrió durante la última audiencia general de Benedicto XVI.
Gaudium Press / Sonia Trujillo
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