jueves, 21 de noviembre de 2024
Gaudium news > "No nos desanimemos: tenemos la fuerza del Espíritu para vencer las tribulaciones"; dijo el Papa Francisco durante la Misa de Confirmación de 44 jóvenes

"No nos desanimemos: tenemos la fuerza del Espíritu para vencer las tribulaciones"; dijo el Papa Francisco durante la Misa de Confirmación de 44 jóvenes

Imposisión Manos.JPG
El Santo Padre, junto con los sacerdotes concelebrantes, durante la imposición de las manos a los confirmados

Ciudad del Vaticano (Lunes, 29-04-2013, Gaudium Press) Tres fueron los pensamientos que ayer reflexionó el Papa Francisco durante la Homilía de la celebración Eucarística que presidió en la Plaza de San Pedro: la novedad de Dios, las tribulaciones en la vida y la firmeza en el Señor.

El evento tuvo lugar por ocasión del Sacramento de la Confirmación que el Santo Padre confirió a jóvenes del mundo como parte de la Jornada de los Jóvenes Confirmados que organizó el Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización, acontecimiento que tuvo lugar desde el pasado sábado 27, hasta ayer, 28 de abril.

Justamente previo a la Santa Misa, un poco antes de las 10:00 de la mañana, Mons. Rino Fisichella, Presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización, saludó al Santo Padre y presentó a los jóvenes que recibirían de él la Confirmación. Estaban presentes un total de 44 jóvenes procedentes de los 5 continentes. Por América Latina habían representaciones de Argentina, Brasil y Colombia.

Papa Francisco homilia.JPG
Durante la Homilía, Fancisco reflexionó sobre tres puntos: la novedad de Dios, las tribulaciones en la vida y la firmeza en el Señor.

Durante la Homilía, Francisco, al reflexionar sobre tres pensamientos dijo a los jóvenes que «la novedad de Dios no se asemeja a las novedades mundanas», puesto que «la novedad que Dios ofrece a nuestra vida es definitiva, no sólo en el futuro, cuanto estemos con Él, sino también hoy».

Ante lo cual continúo: «Abrámosle la puerta, dejemos que Él nos guíe, dejemos que la acción continua de Dios nos haga hombres y mujeres nuevos, animados por el amor de Dios, que el Espíritu Santo nos da».

En su segunda reflexión, refiriéndose a las tribulaciones de la vida, el Pontífice dijo: «El camino de la Iglesia, también nuestro camino personal, no es siempre fácil, encontramos dificultades, tribulaciones (…) Pero las dificultades, las tribulaciones, forman parte del camino para llegar a la gloria de Dios, como para Jesús, que ha sido glorificado en la Cruz; las econtraremos siempre en la vida. No nos desanimemos: tenemos la fuerza del Espíritu para vencer nuestras tribulaciones».

En su último punto de reflexión, el Papa exhortó especialmente a los confirmados a permanecer estables en el camino de la fe con una firme esperanza en el Señor. «Aquí está el secreto de nuestro camino. Él nos da el valor para caminar contra corriente. Escuchen bien jóvenes: ir contra corriente. Esto hace bien al corazón, pero hace falta valor para ir contra corriente», continuó.

Finalmente, les invitó a seguir los grandes ideales: «¡Apuesten por los grandes ideales, por las cosas grandes, nosotros los cristianos no hemos sido elegidos por el Señor para las cosas pequeñas, vayan siempre más allá, hacia las cosas grandes, jóvenes, juéguesen la vida por grandes ideales!».

Plaza de San Pedro.jpg
Aspecto de la Plaza de San Pedro durante la Celebración Eucarística.

Tras su Homilía siguió la Liturgia de la Confirmación, en la que los jóvenes y fieles presentes renovaron sus promesas bautismales y el Papa impuso sus manos sobre los confirmados.

Ya al finalizar la Misa el Pontífice los encomentó a la protección de Nuestra Señora, recordándoles que «ella nos enseña qué cosa es vivir en el Espíritu Santo» y que «cada cristiano es llamado a llevar consigo a Jesús, como María lo hizo».

Más adelante también saludó a los miles de peregrinos presentes en la Plaza de San Pedro, quienes repletaron el lugar pese al fuerte sol que ayer hizo en la Ciudad Eterna, y manifestó su cercanía con las familias de las víctimas de un derrumbre en una fábrica en Bangladesh.

Al concluir su saludo, rezó junto a los fieles el Regina Coeli e inició un recorrido en papamóvil por la Plaza vaticana.

Gaudium Press / Sonia Trujillo

 

Deje su Comentario

Noticias Relacionadas