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| La foto de los Cardenales, obispos y sacerdotes que participaron en la Eucarístía de Acción de Gracias, junto con el Presidente colombiano. |
Roma (Lunes, 13-05-2013, Gaudium Press) Con gran gozo se reunieron hoy en la Basílica de San Pedro centenas de colombianos para dar gracias a Dios por la Canonización de la primera santa de Colombia, Madre Laura Montoya Upegui, evento que ocurrió ayer en la Plaza de San Pedro.
La celebración Eucarística de Acción de Gracias, que inició a las 8:00 horas, fue presidida por el Cardenal Rubén Salazar Gómez, Arzobispo de Bogotá y Primado de Colombia; y concelebrada por los cardenales colombianos, Darío Castrillón Hoyos, Prefecto Emérito de la Congregación para el Clero, y Pedro Rubiano Sánez, Arzobispo Emérito de Bgotá.
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| El Cardenal Rubén Salazar, presidió la celebración Eucarística. |
También estuvieron presentes varios obispos colombianos, entre ellos el Arzobispo de Medellín, Mons. Ricardo Tobón Restrepo; el Arzobispo de Cali, Darío de Jesús Monsalve; el Obispo de Jericó, Mons. Roberto López; el obispo de Fontibón; Juan Vicente Córdoba; así como Mons. Octavio Ruiz, Secretario del Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización; y el Nuncio Apostólico en Colombia, Mons. Ettore Balestrero; además de varios sacerdotes colombianos.
Durante la Homilía, el Cardenal Salazar destacó cómo la Madre Laura «descubrió el amor de Dios y sintió la necesidad de llevar ese amor a los demás», especialmente a los más pobres y desprotegidos, a quienes en la selva llevó luz y esperanza.
Luego, refiriéndose al modelo de santidad de la religiosa colombiana, el purpurado llamó para que todos también sean portadores de luz, esperanza y misericordia, especialmente hacia quienes más lo necesitan.
«Vivimos en un mundo donde sentimos el dolor y la desesperanza; es un mundo donde experimentamos la muerte (…), pero Dios no se olvida de sus hijos (…) y quiere que seamos nosotros los que llevemos su luz y su misericordia a los demás», añadió.
En este sentido, el Cardenal recordó que «es posible, con el amor, transformar el mundo», tal como lo hizo Santa Laura Montoya Upegui.
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Al finalizar la Santa Misa, la Hermana Ayda Orobio, Superiora General de la Congregación de las Misioneras de la Madre Laura, agradeció a todos los presentes, en especial a los peregrinos colombianos que ayer se dieron cita en la Plaza de San Pedro para participar de la Cermonia de Canonización que presidió el Papa Francisco.
Y como manera de agradecimiento, la religiosa recordó las palabras que el Pontífice pronunció ayer, durante la canonización, al refererirse a la santa colombiana: «Esta primera santa nacida en la hermosa tierra colombiana nos enseña a ser generosos con Dios, a no vivir la fe solitariamente -como si fuera posible vivir la fe aisladamente-, sino a comunicarla, a irradiar la alegría del Evangelio con la palabra y el testimonio de vida allá donde nos encontremos. En cualquier lugar donde estemos, irradiar esa vida del Evangelio. Nos enseña a ver el rostro de Jesús reflejado en el otro, a vencer la indiferencia y el individualismo, que corroe las comunidades cristianas y corroe nuestro propio corazón, y nos enseña a acoger a todos sin prejuicios, sin discriminación, sin reticencia, con auténtico amor, dándoles lo mejor de nosotros mismos y, sobre todo, compartiendo con ellos lo más valioso que tenemos, que no son nuestras obras o nuestras organizaciones, no. Lo más valioso que tenemos es Cristo y su Evangelio».
En la celebración Eucarística también estuvo presente el Presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, quien llegó acompañado por su familia; así como el Embajador de Colombia ante la Santa Sede, Germán Cardona, y demás miembros de la comitiva colombiana presentes ayer en la Ceremonia de Canonización.
Gaudium Press / Sonia Trujillo
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