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Bogotá (Miércoles, 19-07-2013, Gaudium Press) Del 19 al 21 de julio tendrá lugar en Bogotá el «Viñedo de Raquel», un retiro que tiene por objeto sanar las heridas espirituales y psicológicas de las mujeres que han abortado.
La doctora Danelia Cardona, Directora del Departamento de Promoción y Defensa de la Vida de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), quien estará presente en el retiro, en entrevista con el Departamento de Comunicaciones de la CEC, se refirió las características del «Viñedo de Raquel»: «Son retiros de alta confidencialidad, ya que una persona que ha abortado carga con una gran culpa y un gran dolor, y, por lo tanto, le cuesta mucho hablar del tema».
Allí, a través de la técnica de «Escritura Viviente» se hace un proceso de sanación interior por medio de la Palabra de Dios. «Por medio de los Evangelios y de la Palabra de Dios se hace un proceso de reconciliación consigo misma, con sus hijos y con Dios. Las mujeres y los hombres involucrados en un aborto van logrando salir delante de este profundo dolor y todos esos síntomas que caracterizan lo que se conoce como ‘Síndrome Post aborto'», continuó Cardona.
En la entrevista, la Directora del Departamento de Promoción y Defensa de la Vida también explicó las consecuencias que deja un aborto en el corazón de la mujer y del hombre que ha abortado: «El aborto genera unos signos y unos síntomas que afectan varias dimensiones del hombre y de la mujer involucrados en el aborto, sobre todo la mujer. Ella empieza a tener dificultades en su dimensión neurovegetativa, es decir, no duerme, está en estado de ansiedad, en alerta todo el tiempo, tiene problemas relacionales, empieza a desarrollar irritabilidad y casi que un rechazo a la figura masculina; también tienen dificultades con toda su parte afectiva, entonces vive con mucha culpa, dolor y angustia».
Explicó también que la experiencia del «Viñedo de Raquel», así como otras experiencias psico-espirituales de sanación post aborto, ayudan a curar el dolor, pero nunca a olvidar al hijo que no se tuvo: «Un hijo nunca se olvida, las mujeres se reconcilian consigo mismas, con sus hijos, con Dios, hacen verdaderamente un proceso de mejoría de su estado mental y de un proceso de sanación interior, pero jamás se van a olvidar de su hijo, y siempre lo van a llevar en su corazón».
Un estudio reciente reveló que el 81% de las mujeres que han abortado, es decir 8 de 10, tienen el riesgo de desarrollar algún tipo de trastorno psiquiátrico, muchos de los cuales se relacionan con el uso del alcohol, las drogas, la depresión y conductas suicidas.
Con información de la CEC.
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