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Jartum (Martes, 30-07-2013, Gaudium Press) Se volvió más peligroso para un sudanés convertirse del islam para el Catolicismo, después de la secesión de Sudán del Sur, ocurrida en julio de 2011. Es lo que afirman fieles católicos de comunidades locales.
El actual presidente de Sudán Omar al-Bashir declaró, en varias oportunidades, su intención de reforzar la ‘sharia’, ley musulmana que, a ser aplicada, tornaría el país enteramente islámico, con las consecuencias que esto traería para todos.
Por ejemplo, en sintonía con la ley islámica, abandonar la religión de Mahoma es un crimen pasible de pena de muerte. La pena capital, como punitiva de conversión al cristianismo, no fue oficialmente aplicada en los últimos 20 años. Sin embargo, alrededor de 170 personas fueron encarceladas o incriminadas por apostasía entre 2011 y 2012.
ONGs que actúan en la región, informan que un cristiano morador de los Montes Nuba y que huyó de Sudán, reveló que las autoridades están buscando a aquellos que se convirtieron y abrazaron la Fe Cristiana. Él fue preso en Jartum, el 23 de febrero de este año y largamente interrogado por los funcionarios del «National Intelligence Security Service». Su computadora y celular fueron confiscados, además de retirado su pasaporte.
Agentes del gobierno acusaron a este cristiano de espionaje a favor de los rebeldes anti-Sudán escondidos en los Montes Nuba, donde una campaña militar está siendo conducida por el gobierno hace dos años. Una de las exigencias de los policías fue que fuesen revelados nombres de otros musulmanes que hubiesen cambiado de religión, abrazando la Fe Cristiana.
Según nota del grupo «Barnaba Team», ocupado en la defensa de los cristianos y por la libertad religiosa, la «persecución de los cristianos en Sudán, que es hoy 98% musulmán, aumentó bruscamente después de la secesión de Sudán del Sur. Iglesias son demolidas, instituciones cristianas y escuelas cerradas, cristianos presos, trabajadores cristianos extranjeros expulsados y publicaciones cristianas secuestradas».
También, en abril de este año, el gobierno anunció que no concederá nuevas licencias de construcción de edificios eclesiásticos. (JSG)
Con informaciones FIDES.
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