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Bogotá (Viernes, 02-09-2013, Gaudium Press) Con ocasión de la Fiesta de San Juan María Vianney, conocido como el Santo Cura de Ars, y quien es el patrono de los sacerdotes, la Arquidiócesis de México celebrará el día del presbítero.
Para conmemorar este acontecimiento, el Cardenal Norberto Rivera Carrera, Arzobispo Primado de México se encontrará con los sacerdotes de su diócesis el próximo lunes 5 de agosto en un evento que tendrá lugar desde las 10:00 de la mañana en el Seminario Conciliar de México.
Según una nota de prensa emitida por el Sistema Informativo de la Arquidiócesis de México (SIAME), el encuentro sacerdotal se llevará a cabo con el propósito de propiciar la fraternidad entre los presbíteros y «manifestar el deseo de secundar el modelo de vida de San Juan María Vianney, proclamado el 19 de junio de 2009 por el Papa Emérito Benedicto XVI ‘patrono universal de todos los sacerdotes católicos'».
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Precisamente el Pontífice Emérito, en junio de 2009 y a través de una carta pastoral, para conmemorar el 150 aniversario del nacimiento del Santo Cura de Ars, convocó un Año Sacerdotal que ocurrió desde el 19 de junio de 2009 hasta la misma fecha de 2010.
En dicha carta, Benedicto XVI señalaba: «‘El Sacerdocio es el amor del corazón de Jesús’, repetía con frecuencia el Santo Cura de Ars. Esta conmovedora expresión nos da pie para reconocer con devoción y admiración el inmenso don que suponen los sacerdotes, no sólo para la Iglesia, sino también para la humanidad misma. Tengo presente a todos los presbíteros que con humildad repiten cada día las palabras y los gestos de Cristo a los fieles cristianos y al mundo entero, identificándose con sus pensamientos, deseos y sentimientos, así como con su estilo de vida. ¿Cómo no destacar sus esfuerzos apostólicos, su servicio infatigable y oculto, su caridad que no excluye a nadie? Y ¿qué decir de la fidelidad entusiasta de tantos sacerdotes que, a pesar de las dificultades e incomprensiones, perseveran en su vocación de ‘amigos de Cristo’, llamados personalmente, elegidos y enviados por Él?».
San Juan María Vianney, originario de Dardilly -cerca de Lyon, Francia- era miembro de la Tercera Orden Franciscana. Por mucho tiempo tuvo que superar infinidad de dificultades para poder ordenarse sacerdote, hasta que por bendición de Dios logró este gran anhelo.
Como sacerdote fue por excelencia un gran párroco, entregándose a esta hermosa labor por más de cuarenta años en la aldea de Ars. A diario el Santo Cura ofrecía el sacramento de la reconciliación, catequizaba a los niños y celebraba devotamente la Santa Misa. Por sus consejos, sabiduría y gran caridad fue conocido por toda Europa.
Con información de SIAME.
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