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Brasilia (Martes, 20-08-2013, Gaudium Press) El próximo domingo 25, será celebrado en la Iglesia en Brasil el Día del Catequista. Por ocasión de la fecha, el presidente de la Comisión Episcopal Pastoral para Animación Bíblico-Catequética de la CNBB, Mons. Jacinto Bergmann, divulgó un mensaje destinado a todos los catequistas de los Estados brasileños.
En el mensaje, Mons. Jacinto describe que «un gran grito de alabanza y acción de gracias brota de nuestro corazón, por ocasión, una vez más, del Día del Catequista», donde celebramos el ministerio Bíblico-Catequético «de todos nosotros», considerado esencial en la vida de la Iglesia.
«¿Qué sería de la Iglesia en Brasil sin la pléyade de catequistas esparcidos por todas las ‘periferias existenciales’ de su inmenso territorio?», indagó Mons. Bergmann a sus lectores.
El presidente de la Comisión Episcopal de la CNBB recordó los estudios de reflexión sobre el documento de la «Catequesis Renovada», en alusión al Año de la Fe.
Él deseó que cada catequista sintiese la profunda alegría por las vidas generadas a través de las enseñanzas del Evangelio, que impulsaron el caminar de la Iglesia.
Mons. Jacinto retrató la dedicación y los esfuerzos de los catequistas, «que gastaron lo mejor de sus vidas para divulgar y tornar vivo en nuestras comunidades este espíritu nuevo».
Al hablar sobre la determinación de Fray Bernardo Cansi, perteneciente a la orden de los capuchinos y miembro de la Provincia del Brasil Central y de la Academia de Letras de Brasilia, resaltó que él hizo de la «Catequesis Renovada» «su gran misión para servir a Jesucristo de forma incansable».
«En la persona de él agradecemos a Dios toda la nube de catequistas y biblistas al servicio de la renovación Bíblico-Catequética. Y también agradecemos a Dios por cada uno de ustedes que hasta hoy luchan y, sin desfallecer, continúan luchando para tornar realidad el proceso de Iniciación a la Vida Cristiana y de Animación Bíblica de la Vida y la Pastoral, que son los frutos actuales de ese esfuerzo de renovación», dijo Mons. Jacinto.
Referente a la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), el presidente de la Comisión Bíblico-Catequética afirmó que el evento también impulsó un profundo proceso Bíblico-Catequético, envolviendo a un gran número de obispos, presbíteros, religiosos y laicos, especialmente a los jóvenes venidos de diversos países para el encuentro con el Papa Francisco, considerado el «catequista principal».
«Una catequesis, hecha por él (Papa Francisco), de gestos, de actitudes, de simbologías y de palabras llenas de afecto y unción dirigidas al corazón de los jóvenes y de todas las personas, provocando ánimo, coraje, esperanza e intensa alegría. Una perfecta experiencia de catequesis, como el propio documento ‘Catequesis Renovada’ propone», resaltó.
Al final, Mons. Jacinto agradeció el papel de Nuestra Señora Aparecida, «gran catequista que sustenta la Fe, la esperanza y el amor de nuestro pueblo brasileño. Que Ella esté siempre a nuestro lado y nos alcance la bendición de la Trinidad Santa», finalizó. (LMI)
Con informaciones de la CNBB.
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