Ciudad del Vaticano (Jueves, 05-09-2013, Gaudium Press) La reunión anual del «Ratzinger Schülerkreis», realizada entre el 31 de agosto y 03 de septiembre, en Castel Gandolfo, ocurrió como era esperado: el Papa Emérito no participó del encuentro.
Pero Benedicto XVI no olvidó a sus ex-alumnos. Ellos pudieron asistir a una misa celebrada por el Papa Emérito, el domingo, cuando la homilía fue esencialmente dedicada al tema de la humildad.
La misa fue celebrada en la capilla de la Gobernación de la Ciudad del Vaticano, rezada en alemán y de ella participaron cerca de 50 personas. Entre los concelebrantes estaba el cardenal suizo Kurt Koch, presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, y el Cardenal Christoph Schönborn , arzobispo de Viena, ex-alumno del profesor Ratzinger.
Recordando que todo el mundo quiere tener un buen lugar en su vida, Benedicto XVI, advirtió sin embargo que, «un lugar que puede parecer muy bueno, puede venir a ser un lugar muy malo». Y mostró cómo, en las últimas décadas vimos primeros ser derrumbados y, de repente, tornarse el último.
Citando la «extrema humillación» que Cristo vivió en la cruz, el Papa Emérito exhortó a los participantes a rezar a fin de aceptar con humildad, en su propia manera, el misterio de la exaltación y humillación.
Sea cual sea el lugar que la historia nos da, dijo Benedicto XVI, lo que importa es «la responsabilidad delante de Dios, la responsabilidad de amor, justicia y verdad».
Llevando una vida muy discreta, el Papa Emérito apareció nuevamente en público. La última vez que eso ocurrió fue el 05 de julio cuando, sin aviso previo, con el Papa Francisco inauguró un monumento en los Jardines del Vaticano.
Y se dio en el día mismo en que el Papa Francisco publicó su primera encíclica, «Lumen fidei», documento que, en gran parte, fue escrito por su antecesor. (JSG)
Deje su Comentario