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Doylestown (Lunes, 18-11-2013, Gaudium Press) Situado en Doylestown, cerca de Filadelfia en los Estados Unidos, y en medio de un paraje natural que en invierno se cubre suavemente de nieve, se encuentra el Santuario Nacional de Nuestra Señora de Czestochowa: » La Czestochowa Estadounidense»
Establecido primero como una pequeña capilla granero en el año 1955 bajo el cuidado de los Padres Paulinos, los mismos que están a cargo de custodiar la Imagen Milagrosa de la Virgen venerada en Polonia, el Santuario es hoy una gran edificación, construida por los polacos que viven en los Estados Unidos, que recibe a miles de peregrinos de los Estados Unidos y el mundo.
Pero el gran tesoro del Santuario se halla en su interior: una copia fiel de la imagen polaca de la Virgen de Czestochowa -pintada por Leonardo Torwirt- que fue bendecida en la Capilla Milagrosa de Jasna Gora en Polonia y luego llevada a los Estados Unidos con el propósito de extender su devoción en el continente americano. Esta imagen fue bendecida también por el Papa Juan Pablo II, quien fue gran devoto de Nuestra Señora de Czestochowa, el 2 de agosto de 1980.
De granero al Czestochowa de América
La historia de la Czestochowa Estadounidense comienza en el año 1953 cuando el sacerdote de origen polaco y Padre Paulino Michael M. Zembrzuski, compra una pequeña parcela cultivable cerca de Doylestown, Pensilvania. Un par de años después convierte un pequeño granero de la propiedad en una capilla que fue dedicada a Nuestra Señora de Czestochowa el 26 de junio de 1955.
Una década después, en el año 1966, se materializó el sueño de construir un Santuario para conmemorar el milenio de Polonia. Así se construyó una edificación de estilo moderno que fue diseñada por el arquitecto polaco George Szeptycki.
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| La comunidad polaca en los Estados Unidos construyó el Santuario. |
En su interior el Santuario posee grandes vitrales donde están representados los momentos más importantes de la historia del cristianismo en Polonia y en los Estados Unidos.
Además de la Capilla de la Virgen polaca, en el Santuario también se encuentra una capilla dedicada a la Divina Misericordia, en donde hay un cuadro de Jesús Misericordioso, así como una dedicación a Faustina Kowalska, santa polaca conocida como «Apóstol de la Divina Misericordia». También hay una Capilla dedicada a Nuestra Señora de Guadalupe y otra a María de Nazaret.
En el exterior del Santuario hay una bella recreación de los misterios del Santo Rosario en el «Jardín del Rosario», y se puede realizar un recorrido por varias advocaciones marianas con una bella efigie de de Nuestra Señora de la Asunción, en la gruta de Nuestra Señora de Lourdes y en la Capilla de la Virgen de Fátima. Contiguo al Santuario se encuentra el Monasterio de la Orden Paulina y una representación del Papa Juan Pablo II, próximo nuevo santo de la Iglesia Católica.
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| Capilla de la Virgen de Czestochowa al interior del Santuario Estadounidense. |
El Evangelista Lucas, su pintor
De acuerdo con la tradición, se cree que la imagen original de la Virgen de Czestochowa, tan venerada por los polacos, es de autoría del Evangelista Lucas. La imagen, una pintura que representa a María sosteniendo al Niño Jesús y que refleja en sus ojos una profunda tristeza, fue llevada de Jerusalén a Constantinopla donde permaneció por varios siglos protegida y venerada por la familia del Emperador.
Se cree que la imagen llegó a Polonia como parte de una dote de un matrimonio entre familias reales de Constantinopla y Kiev. La historia narra que la venerada representación mariana fue hallada en el castillo de Belz por Ladislao, príncipe de Opole, quien quiso un mejor lugar para la imagen y la trasladó a Czcestochowa, en el centro de Polonia.
Fue el mismo Ladislao quien solicitó a los miembros de la Orden de San Pablo el Eremita, los Padre Paulinos, la custodia de la imagen venerada.
Con información del Santuario Nacional de Nuestra Señora de Czestochowa.
Gaudium Press / Sonia Trujillo
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