Ciudad del Vaticano (Lunes, 25-11-2013, Gaudium Press) En la Misa celebrada en la mañana de este viernes 22, en la Casa Santa Marta, el Papa Francisco afirmó que el Templo es un lugar sagrado donde lo que es más importante no es el rito, sino la «adoración al Señor», resaltando que el ser humano, como «templo del Espíritu Santo», es llamado a oír a Dios dentro de sí, a pedirle perdón y a seguirlo.
Inspirado en el trecho litúrgico del Antiguo Testamento, en que Judas Macabeo re-consagra el Templo destruido por las guerras, el Santo Padre profirió su homilía diciendo que «el Templo es el punto de referencia de la comunidad del pueblo de Dios», donde vamos a rezar, alabar al Señor, dar gracias, pero sobretodo a adorar», pues «en el Templo se adora al Señor».
Para el Pontífice, «lo más importante es la adoración», pues «toda la comunidad reunida mira hacia el altar, donde se celebra el sacrificio y se adora».
Al subrayar el Evangelio del día (Lc 19, 45-48), el Papa Francisco recordó que Jesús expulsaba a los vendedores que usaban el Templo como un local de negocios, más que para la adoración.
«San Pablo nos dice que nosotros somos templos del Espíritu Santo. Yo soy un templo. El Espíritu de Dios está en mí. En este caso, tal vez no podemos hablar de adoración como antes, sino de una especie de adoración que es el corazón que busca el Espírito del Señor dentro de sí, y sabe que Dios está allí y que el Espíritu Santo está dentro de si. Él lo oye y lo sigue», completó.
Concluyendo, cuando se habla de alegría en el Templo, significa «toda la comunidad en adoración, en oración, en acción de gracias, en alabanza». Yo en la oración con el Señor, que está dentro de mí porque yo soy ‘templo'».
«Que el Señor nos conceda este verdadero sentido de Templo, para poder proseguir en nuestra vida de adoración y de escucha de la Palabra de Dios». (LMI)
Deje su Comentario