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Bogotá (Lunes, 03-02-2013, Gaudium Press) Del 3 al 7 de febrero se reúne la XCVI Asamblea Plenaria del Episcopado Colombiano para hablar sobre Celebración y vivencia de la Fe. Esta reunión hace parte de un conjunto integrado también por las dos Asambleas plenarias anteriores, en las que se habló de los dos primeros ‘momentos’ del proceso evangelizador, la acción misionera, la acción catequético-iniciatoria, y este tercero que sería el de fortalecimiento de la fe.
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| Foto: Conferencia Episcopal de Colombia |
Este fortalecimiento de la fe se realiza, en sentido estricto, mediante la acción pastoral dirigida a todos los fieles de la comunidad cristiana.
«La acción pastoral busca fundamentalmente llevar a los creyentes a consolidar su fe, celebrarla y vivirla, tanto individualmente como en experiencia comunitaria, tal como lo atestigua san Lucas en los Hechos de los Apóstoles donde presenta la experiencia de la primera comunidad eclesial (Cf. Hch 2, 42-47)», afirman los obispos.
«La acción pastoral, se da en los diversos espacios eclesiales (diócesis, parroquias, grupos, movimientos apostólicos y comunidades eclesiales de base), fundamentalmente a través de las ‘funciones’ o ‘dimensiones’ profética (Kerigma), litúrgica (Leitourgía), comunitaria (Koinonía) y social y caritativa (Diakonía), las cuales tienen su vértice en el testimonio (Martirya)». Estos ejes constituirán también los ejes temáticos del análisis pastoral de esta Asamblea.
Declaraciones del Cardenal Salazar
«Esa acción de Evangelizar tiene 3 etapas fundamentales», dijo el Cardenal Rubén Salazar, Arzobispo de Bogotá, en rueda de prensa al inicio de esta Asamblea. «La primera es el anuncio mismo del Evangelio, especialmente para aquellos que no lo conocen o para aquellos que conociéndolo han perdido el sentido fundamental de Evangelio. El segundo paso es iniciar un proceso por el cual la persona se hace cristiana y ahí entonces vienen todos los procesos de catequesis. Y el tercer paso es el permitir que el cristiano crezca en su fe, crezca en su esperanza, crezca en su amor, y viviendo profundamente la comunión al interior de la Iglesia pueda ser testigo de Dios en el mundo, pueda trasformar el mundo con la fuerza de su amor».
«En esta Asamblea vamos a tratar el 3er. paso -profundizó el purpurado- que es como el cristiano permanece vivo en su fe y al mismo tiempo crece en ella de tal manera que se pueda convertir, como lo dice el mismo Evangelio en un fermento que vaya trasformando poco a poco la sociedad por los caminos de la justicia, de la fraternidad, de la solidaridad, de la paz».
La Iglesia al servicio de la sociedad
«Esto tiene unas repercusiones muy importantes para la vida de la sociedad -resaltó también el Cardenal Salazar. Porque nace la pregunta de hasta donde la Iglesia está al servicio de la sociedad. Muchas veces se tiene la impresión de que se concibe la Iglesia como una especie de ONG que busca su propio provecho, que busca servirse a sí misma. Y la realidad es totalmente otra. La Iglesia no es una ONG. La Iglesia es la comunión de los que creen en Nuestro Señor Jesucristo, y por lo tanto aquellos que viven la experiencia fundamental del amor de Dios y del amor a los demás, y a partir de ese amor a Dios y amor a los demás, se pone totalmente al servicio de la sociedad».
Gaudium Press / S. C.
Con información de la Conferencia Episcopal de Colombia
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