Singapur (Jueves, 27-02-2014, Gaudium Press) No existe un registro de cuántos católicos hispanos residen en Singapur, pero una comunidad de fieles se reúne cada mes para celebrar la Eucaristía en español y organizar actividades que mantienen la unión y algunas manifestaciones de fe propias de las regiones de donde provienen sus miembros. El sacerdote Joe Lopez, del Opus Dei, sirve a esta comunidad y relató al informativo de la Iglesia en ese país, Catholic News, las características de esta vivencia de la fe.
Niños de la comunidad hispana de Singapur, tras la celebración de la Primera Comunión. Foto: Catequesis en Singapore |
La comunidad hispana en Singapur nació en 1999, cuando un grupo de católicos mexicanos organizó una Eucaristía en honor de Nuestra Señora de Guadalupe (cuya fiesta se celebra el día 12 de diciembre) e invitaron al P. López a celebrarla. El sacerdote había llegado ese mismo año a Singapur y aceptó la invitación de los fieles. Desde ese momento comenzó a consolidarse una comunidad de católicos provenientes de España, México, Chile, Argentina, Colombia, Venezuela, Cuba, Paraguay, Uruguay y Ecuador.
Vida de fe propia e integración con la iglesia local
Las Eucaristías en español se celebran en la capilla Maris Stella los primeros domingos de cada mes, y los fieles hispanos asisten de forma habitual a las celebraciones en inglés en diferentes parroquias. El tiempo de mayor actividad es el Adviento, cuando los fieles se reúnen para servicios penitenciales, el canto de villancicos y la celebración preparativa de las Posadas siguiendo la costumbre mexicana. La Eucaristía de Navidad también es celebrada en español. Otra celebración importante es la fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe, que convocó inicialmente a los fieles.
Otras fiestas de gran importancia, como la Pascua, no son celebradas de manera separada, ya que se invita a la comunidad hispana a mantener la unidad con la parroquia a la que pertenece. «Ellos ven con cuánta seriedad los católicos de Singapur toman su fe», explicó el P. López. Muchos de los hispanos «son bautizados pero no practicantes», por lo cual «se benefician mucho cuando asisten a la Eucaristía en las parroquias».
Uno de los obstáculos que enfrenta la comunidad es que varias de las familias hispanas residen temporalmente en Singapur y no llegan a relacionarse estrechamente con la Iglesia local. Algunos no tienen un conocimiento adecuado del idioma inglés y por este motivo les cuesta seguir la liturgia con atención y unirse a los cantos en la Eucaristía.
Formación y caridad
Algunos matrimonios y fieles de la comunidad hispana junto al P. López, durante uno de los «Encuentros Cristianos». Foto: Católicos Singapore. |
Como los hijos de los hispanos atienden normalmente a clases en escuelas internacionales, viven en un ambiente donde la religión recibe menos importancia, advirtió Mila Navarro, una madre de familia parte de la comunidad hispana. Por este motivo conocer a niños católicos que comparten su cultura cobra una especial importancia. Desde los tres y hasta los 14 años, reciben formación semanal en catecismo y preparación para la Primera Comunión y la Confirmación. Los catequistas son padres de familia voluntarios y los textos de formación son traídos de España o México.
También existe un grupo juvenil en español para edades de 17 a 19 años que se reúne todos los viernes para la Adoración Eucarística y compartir un tiempo de comunidad a la hora de la comida. La iniciativa busca que ellos se hagan «amigos en la fe» según indicó Cecilia Tagle, otra catequista.
El Padre López señaló que la comunidad hispana expresa una «gran sensibilidad por los más necesitados en países más pobres», por lo cual se organizan actividades caritativas y se recolectan fondos de ayuda. Una de las principales actividades es la visita a orfanatos en Vietnam, a los cuales se llevan cajas de juguetes y prendas de vestir. Algunas veces se incluyen libros y dulces, y algunos adultos y jóvenes hispanos acompañan la delegación para compartir su tiempo con los niños de las instituciones. También se asiste a un ancianato en Indonesia.
El Padre López espera que la interacción entre los católicos hispanos y la comunidad local sea más estrecha, y propone que los fieles singapurenses puedan asistir a algunas celebraciones, como la de Las Posadas. En medio de las barreras que pueden imponer el lenguaje y la cultura, la comunidad católica hispana en Singapur es una expresión de la unidad y la rica diversidad de la Iglesia universal en un mundo globalizado.
Con información de Catholic News Singapur.
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