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Madrid (Viernes, 07-03-2014, Gaudium Press) De los 5.385.601 alumnos españoles escolarizados unos 3.501.555 reciben actualmente enseñanza religiosa católica, es decir un 65%. Los datos fueron presentados esta semana por la Comisión Episcopal de Enseñanza y Catequesis de la Conferencia Episcopal Española (CEE), quien dio a conocer su informe anual sobre el número de alumnos que reciben educación católica en las instituciones educativas, no sólo católicas, sino de carácter civil y estatal.
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| El número de alumnos que reciben formación religiosa moral subió 1.5% en los centros educativos católicos. |
De acuerdo con los datos recabados en 61 diócesis de las 69 existentes en el país europeo, y en relación con las cifras del año anterior, el número de alumnos que reciben formación religiosa moral subió 1.5% en los centros educativos católicos, y un 1.6% en los de titularidad civil, mientras que los centros estatales bajaron 1.8%. A nivel general, la cifra de alumnos escolarizados que cursan religión católica bajó 1.7% en relación con el curso pasado.
Para la Comisión Episcopal de Enseñanza y Catequesis «esta disminución del número del número de alumnos que optan por la enseñanza religiosa católica se debe, entre otros motivos, a las dificultades y trabas de tipo social, legislativo y administrativo que se ponen a la enseñanza religiosa».
«Mirando al futuro -continúa la Comisión- debemos decir que la LOMCE -Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa- mejora la situación de enseñanza religiosa escolar en las etapas de Educación Primaria y Educación Secundaria. Sin embargo, su regulación en Bachillerato no garantiza la oferta obligatoria de la asignatura por parte de los centros ni, consecuentemente, que los padres y, en su caso, los alumnos puedan optar por ella».
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En este sentido, la Comisión considera que «en Bachillerato no se garantiza de manera suficiente y adecuada el Derecho de los padres a que sus hijos reciban la formación religiosa moral que aquellos deseen».
Es por ello que los Obispos de la Comisión de Enseñanza y Catequesis reiteran su petición para que la enseñanza religiosa, como derecho fundamental de padres y alumnos, «sea una asignatura equiparable a las fundamentales, de oferta obligatoria para los centros y voluntaria para los alumnos, y que el hecho de recibir o no esta enseñanza no suponga discriminación académica alguna en la actividad escolar».
Con información de la CEE.
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