Jerusalén (Sábado, 08-03-2014, Gaudium Press) La Iglesia en Tierra Santa sabe aplicar el popular adagio que recomienda orar y trabajar para obtener los fines deseados. Mientras el Patriarcado Latino de Jerusalén promueve activamente la oración implorando la llegada d e las lluvias a la región, Cáritas Jerusalén, la agencia católica de asistencia social, instaló tanques de agua y sistemas de riego en una población palestina que padece escasez.
El Patriarca Latino de Jerusalén, Su Beatitud Fouad Twal, renovó el llamado a la oración por la llegada de las lluvias. Foto: LPJ. |
El llamado a la oración por la lluvia que inicialmente se convocó en noviembre de 2013 ya había sido renovado por Su Beatitud Fouad Twal, Patriarca Latino de Jerusalén, el 13 de febrero pasado. El Patriarca dispuso que en las Eucaristías de domingo se incluya una oración especial con este fin y declarar una jornada especial para pedir este don. «Actuando de acuerdo a las palabras de nuestro Señor, quien nos pide confiar en Dios Padre, suplicando e implorando con fe, les motivamos a entonar oraciones y hacer devociones al Señor para que nos salve de este peligro y nos preserve de los males de la sequía, abriendo las puertas de los Cielos y concediéndonos la gracia de la abundante lluvia», exhortó el prelado en su carta pastoral de noviembre.
El Consejo de Presbíteros del Patriarcado Latino de Jerusalén propuso obedecer este llamado a través de una novena especial a San José, cuya fiesta se celebra el día 19 de marzo. El día 10 de marzo comenzará la novena, que incluye una oración por la llegada de las lluvias y que se recomienda realizar después de la Eucaristía diaria o después del rezo del Santo Rosario. Los sacerdotes del Patriarcado pidieron dedicar a esta intención los ayunos que los fieles realicen como parte de la observancia de la Cuaresma.
Acción caritativa
Acompañando estas acciones espirituales, Cáritas Jerusalén venía trabajando durante los últimos siete meses para culminar dos proyectos que alivian las penalidades de los habitantes de dos ciudades palestinas. La agencia católica instaló tanques de agua y sistemas de riego para hacer accesible el agua no contaminada a la población de Ain Arik, a seis kilómetros de Ramallah. Se calcula que al menos 80 familias se ven beneficiadas por el proyecto, que tendrá un impacto positivo en la producción agrícola del lugar. La llegada del agua «transformará Ain Arik en un pequeño paraíso», afirmó el P. Raed Abusahlia, Director General de Cáritas Jerusalén, a la agencia Fides. «Nuestro sueño es ampliar este trabajo productivo a otros pueblos».
En otra ciudad palestina, Zababdeh, Cáritas realizó un trabajo diferente para acondicionar un sistema de drenaje en un lugar donde la llegada de las lluvias suele causar inundaciones. Este proyecto de dos meses de duración significa una mejora de las condiciones de vida para unas 600 personas que padecían riesgo de daños en sus propiedades. Para realizarlo, se contó con el apoyo de Cáritas Bélgica.
Con información de Patriarcado Latino de Jerusalén y Agencia Fides.
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