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Ciudad del Vaticano (Lunes, 31-03-2014, Gaudium Press) El Papa Francisco afirmó a los fieles presentes en la Casa Santa Marta este viernes 28, que Dios siempre nos espera y nos perdona, pues es «el Dios de la misericordia», que celebra cuando retornamos a Él.
En su homilía, el Pontífice dijo que el Señor siente añoranzas de nosotros cuando nos alejamos de Él. Siendo así, partiendo del Libro del Profeta Oseas, en la primera lectura, Dios nos habla con ternura y «nos invita a la conversión».
Esta expresión, continuó el Papa, «suena un poco fuerte», pues en ella se expresa «esa añoranza amorosa de Dios», que nos recuerda la exhortación del Padre al hijo: «Vuelve, es hora de volver para casa».
«Es el corazón de nuestro Padre, Dios es así: no se cansa. Y durante tantos siglos hizo eso, a pesar de tanta apostasía del pueblo. Y Él siempre vuelve, porque nuestro Dios es un Dios que espera. El Señor es fiel a su promesa, porque no puede negar a sí mismo. Y así él esperó por todos nosotros, a lo largo de la historia. Es el Dios que nos espera siempre», observó.
Usando la Parábola del Hijo Pródigo, el Santo Padre reafirmó que nuestro Padre es «el Dios que nos espera». Luego, alertó a los presentes diciendo: «si usted quiere saber sobre la ternura de este Padre, vaya hasta Él y pruebe, después usted me dice», pues «el Dios que espera es también el Dios que perdona», el Dios de la misericordia, que nunca se cansa de perdonar.
Según el Papa Francisco, el Señor «es el primero que cumple el mandamiento del amor».
«Los milagros que Jesús hacía, con muchos enfermos, también eran una señal del gran milagro que cada día el Señor hace con nosotros, cuando tenemos el coraje de levantarnos e ir hasta Él», completó.
Al final, el Pontífice resaltó que «la vida de cada persona, de cada hombre, de cada mujer, que tiene el coraje de aproximarse al Señor, va encontrar la alegría de la fiesta de Dios», que nos espera y nos perdona siempre, haciendo una fiesta cuando volvemos. (LMI)
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