Con mayor apoyo pastoral a los matrimonios, Arquidiócesis de México busca disminuir los divorcios

Ciudad de México (Martes, 15-04-2014, Gaudium Press) De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (INEGI) de México, de 1993 al 2011, el número de divorcios en el país latinoamericano aumentó cerca del 75%, pasando de 5 a 16 separaciones por cada 100 habitantes. Una cifra que no es indiferente para la Iglesia Católica que en repetidas ocasiones ha manifestado su preocupación por la crisis que enfrentan actualmente los matrimonios.

Es por ello que la Arquidiócesis de México, con el impulso del «Directorio Pastoral Arquidiocesano para el Sacramento del Matrimonio»-presentado recientemente por el Cardenal Norberto Rivera Carrera, Arzobispo y Primado de México-, está exhortando a los católicos para que trabajen en el fortalecimiento de la familia y anima a quienes velan por ella en el interior de la Iglesia para que brinden mayor apoyo pastoral a los matrimonios, y así se logre disminuir la tasa de divorcios.

El «Directorio Pastoral Arquidiócesano para el Sacramento del Matrimonio» fue presentado recientemente por el Arzobispo de México / Foto: Miguel González Novo.

Uno de los objetivos de la jurisdicción eclesiales es brindar acompañamiento a todas las etapas del Matrimonio por medio de un proceso de formación de parte de la Pastoral Familiar, así como movimientos eclesiales, que ayuden a los esposos a mantener su unión conyugal.

«Las parejas que han iniciado su recorrido matrimonial necesitan ser apoyadas para que, conforme evolucione su vida matrimonial, también pueda madurar su vida de fe. Será de gran ayuda que se les ofrezca orientación sobre la dignidad de la vida humana, el valor y el significado de la paternidad responsable y la dimensión integral de la sexualidad», tal como anota el directorio pastoral.

Entre las etapas, el directorio hace un especial énfasis en los recién casados, a quienes se les debe acompañar en sus primeros años, puesto que es allí donde se dan situaciones de cambio como es iniciar una nueva vida en pareja y la llegada de los hijos. Asimismo, la Pastoral Familiar ha de darle mayor prioridad a las diversas situaciones difíciles que pueden llegar a enfrentar los esposos, como es la infidelidad y los conflictos intrafamiliares.

Este acompañamiento, como resalta también el directorio, debe igualmente hacer visible los testimonios de matrimonios y familias con experiencias positivo, y que viven la vocación matrimonial a la luz de la fe.

Con información de SIAME.