Arzobispo en E.E.U.U. celebra rechazo de proyecto de ley que motivó oración urgente

Denver (Jueves, 24-04-2014, Gaudium Press) El Arzobispo de Denver, Mons. Samuel Aquila, dirigió a los fieles el pasado 16 de abril una carta de agradecimiento y celebración por el rechazo del proyecto de ley SB175 del Senado del estado de Colorado, que establecería un «derecho» al aborto que bloquearía cualquier intento de restricción de la práctica. La comunicación del prelado es análoga a la efectuada para hacer un llamado urgente a la oración y acción en contra de la medida, unos días antes de su debate en el organismo legislativo.

Mons. Samuel Aquila, Arzobispo de Denver, presidió un evento de oración pública frente al Capitolio estatal de Colorado. Foto: Arquidiócesis de Denver.

«Como lo dije ayer después de que oramos juntos en las gradas del Capitolio estatal», recordó el Arzobispo, «no tenía idea de cuánto impacto podría tener mi carta al pueblo de Colorado». Según relató Mons. Aquila, la respuesta de los creyentes permitió articular un frente común de oposición a la norma que evitó su aprobación. «¡Felicitaciones a la gente de buena voluntad que de todo Colorado que escucharon el llamado de Dios para estar activos en la política y defender la vida en todas sus etapas!», celebró.

Mons. Aquila expresó su agradecimiento a las madres que se hicieron presentes en compañía de sus hijos y los sacerdotes, seminaristas y religiosas que se unieron al llamado a la oración por esta causa. Además manifestó su gratitud a los prelados que manifestaron su respaldo, incluyendo a los Obispos de Colorado Springs y Pueblo, Mons. Michael Sheridan y Mons. Stephen Berg, quienes junto con el Arzobispo firmaron una comunicación especial a los legisladores.

Una vez superado este desafío, el Obispo invitó a los fieles a dedicar su atención a los misterios del Triduo Pascual que se avecinaba (la decisión que puso fin al proyecto se tomó el Miércoles Santo). El prelado indicó que la contemplación de las realidades espirituales en lugar de alejar al hombre de su propia existencia invita a Cristo a estar presente en ella, «y esto es lo mismo que recordar quiénes somos y a Quién pertenecemos».

Finalmente, el Arzobispo recordó a los fieles que Jesucristo es la fuente de fuerza, esperanza y alegría para los creyentes: «Nuestra esperanza no descansa en los poderes del gobierno, ni en las leyes del hombre, sino en el Dios-Hombre Resucitado que conquista la tumba y nunca deja de estar presente entre nosotros», afirmó. «Continuemos siendo levadura en la sociedad. Continuemos buscando el Reino de Dios, ayudándonos mutuamente, particularmente a aquellos que son los más vulnerables».

Con información de Arquidiócesis de Denver.