Roma (Miércoles, 30-04-2014, Gaudium Press) Lejos de ser una práctica del pasado, el ministerio del Exorcismo despierta cada vez más interés en la vida de la Iglesia. Una muestra de ello es la exitosa convocatoria a un curso teórico y práctico sobre Exorcismo y oración de liberación, que impartirá el Ateneo Pontificio Regina Apostolorum de Roma, desde el próximo 05 de mayo. En su novena edición, el ciclo formativo será atendido por unas 170 personas entre sacerdotes, diáconos, religiosas y laicos provenientes de más de 33 países. El programa cuenta con el patrocinio de la Congregación para el Clero y el apoyo de la Asociación Internacional de Exorcistas y la Fundación Dignitatis Humanae.
San Francisco de Borja y el moribundo impenitente. Pintura de Francisco de Goya. |
«El interés es grande y creciente. De hecho, el curso ha sido un éxito más allá de las expectativas», describió Secretario del Grupo de Investigación e Información Socio-Religiosa, organización que junto al Instituto Sacerdos del Regina Apostolorum organiza el curso, a la agencia Zenit. para el experto, en la creciente secularización de la cultura y ante la seducción de lo oculto, existen personas que «lanzan la religión fuera de la puerta y dejan entrar por la ventana la superstición y la irracionalidad». En esta exploración, la persona «no toma las medidas necesarias y razonables para evitar ser vencido» y queda en situaciones en las cuales desconoce cómo responder adecuadamente.
Una visión integral del problema
Según Ferrari, el objetivo del curso es ofrecer elementos de diversas disciplinas para tener una visión en conjunto sobre el tema, que abarca las dimensiones espiritual, psicológica, antropológica, legal, entre otras. Algunos aspectos analizados incluyen el esoterismo, la magia, el ocultismo, el espiritismo y el satanismo. Estos elementos hacen parte de «un ‘mundo paralelo’ que, a menudo, no se toma en serio y que en realidad existe e involucra a muchas más personas de las que nos podemos imaginar», explicó el experto.
El curso, inicialmente abierto a sacerdotes, diáconos y religiosos, comenzó a impartirse también a los seglares. «Entre los laicos que se inscriben encontramos principalmente médicos, enfermeras, psicólogos, abogados, maestros y personas pertenecientes a las fuerzas del orden», relató Ferrari. Esta formación significará un aporte también en otros aspectos como el del respeto de la libertad religiosa (en un tema en el que se destaca una extendida incredulidad) o la prevención de las actividades de grupos satánicos.
Pese a ser una formación dedicada al tema del Exorcismo y la liberación, el experto aclaró que el programa no pretende ofrecer un título de «exorcista». «Para ejercer el ministerio del exorcismo no hay obligación de haber realizado el curso, sino haber recibido el encargo del propio Obispo», aclaró. La idea es, en realidad entrenar a las personas que están en contacto con la gente para que aprendan «a escuchar y entender sus problemas y sus sufrimientos, que no son sólo físicos sino morales y, a menudo, espirituales y existenciales».
Con información de Agencia Zenit.
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