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Santiago (Lunes, 06-07-2009, Gaudium Press) Con mucho dolor y tristeza se vivió la Eucaristía dominical en el Santuario de la Tirana. Ante más de dos mil peregrinos que llegaron a esa población, ubicada a 77 kilómetros de Iquique, monseñor Marco Órdenes, Obispo de Iquique cerró simbólicamente las puertas del Templo Santo en respuesta a la medida sanitaria que canceló la realización de la Fiesta Grande de la Tirana, programada para la próxima semana, debido a la epidemia de la influenza humana.
La Iglesia se mantendrá cerrada por dos semanas y la imagen de la «Chinita» no recorrerá este año las calles de Iquique y Alto Hospicio. En estas dos semanas no se realizaran misas, ni bailes, ni habrá convocatorias masivas; sólo se permitirá el acceso de a uno, por una puerta lateral, a los peregrinos que lleguen a visitar a la Virgen.
Antes del cierre del Templo se realizó una procesión con la imagen de la Virgen por las calles de la Tirana, donde cientos de fieles la despedían a su paso con las manos en alto y lágrimas en los ojos. Luego, Monseñor Órdenes presidió la Santa Misa en la que oró por todos los peregrinos que no podrán asistir este año y manifestó el profundo dolor que vive el mundo cristiano por la suspensión de la celebración.
«Nos encontramos en estos días acongojados y con profunda tristeza, porque no se podrá celebrar la fiesta a Nuestra Señora en este Santuario. Las centenarias costumbres, las distintas realizaciones y programaciones que se tenían, no se podrán realizar. Hay una norma sanitaria que lo impide. Y ciertamente que con dolor tenemos que aceptarlo porque está el principio de la autoridad, de una autoridad de la República en juego y los cristianos somos invitados a obedecer», dijo el Obispo.
Sin embargo, los obispos de las diócesis del Norte Grande coordinados con las asociaciones de bailes y cofradías realizaran «tiranas chicas» en las iglesias de Arica, Iquique, Calama y Antofagasta. Por su parte monseñor Héctor Vargas, Obispo de Arica confía en que no haya problemas, argumentando que «no se ha suspendido la asistencia de público a los estadios. Sería sospechoso que sólo se restringieran las actividades religiosas».
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