Madrid (Lunes, 16-06-2014, Gaudium Press) Con motivo de la Solemnidad de la Santísima Trinidad el Arzobispo de Madrid, Cardenal Antonio María Rouco, presidió una Santa Misa en Acción de Gracias por los matrimonios que conmemoran este 2014 sus bodas de oro y plata. La celebración Eucarística tuvo lugar en la Catedral de la Almudena.
Durante su homilía, el purpurado comparó la unión de la Santísima Trinidad con el esposo y la esposa: «vuestra vida matrimonial y la familia que habéis fundado ha sido un especie de edificio humano y espiritual que ha arrancado del corazón de la fe en Dios. En el Dios de Jesucristo que nos ha dado el don del amor del Espíritu Santo».
Cardenal Rouco, Arzobispo de Madrid / Foto: Barcex. |
«El sacramento del matrimonio quiere decir que ese momento de los síes del esposo y de la esposa hacen un Sí de amor para siempre, quien lo garantiza es Cristo Señor, de una forma que se hace visible en el mismo acto del matrimonio», continuó.
En este sentido el purpurado oró para que el don del Espíritu Santo les permita a los esposos «seguir por el camino de la perfección del amor», y exhortó a los matrimonios para «que sigan siendo testigos de ese amor de Dios en la vida sencilla de todos los días: en casa, en la vecindad, en el trabajo, en la vida social, en la vida pública (…)», sobre todo testigos valientes: «No es fácil hoy ser testigo del matrimonio vivido en plenitud cristianamente. Que lo sean para sus hijos, para sus nietos y para todos (…) En el fondo, el matrimonio y la familia cristiana son el gran sostén de todo el edificio social, que todavía está en pie y está vivo. Es la base fundamental de la vida social y, por supuesto, también de la vida de la Iglesia», concluyó.
Con información de la Archidiócesis de Madrid.
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