Menú 
Roma (Jueves, 03-07-2014, Gaudium Press) La situación de la Iglesia en Corea del Norte es una de las más difíciles del mundo. Los pocos cristianos allí existentes viven su Fe a escondidas.
Las persecuciones comenzaron al final de la II Guerra Mundial, y persisten hasta hoy. «En 1945, por ocasión de la división de las dos Coreas, Pyongyang era conocida como la ‘Jerusalén de Asia’. En ella vivían 50 mil católicos», afirma Marta Petrosillo que pertenece a una organización de Ayuda a la Iglesia necesitada.
Pero la situación en la actualidad cambió radicalmente. En Corea del Norte se practica un culto absoluto hacia la familia Kim que dirige el país desde el final de los años 40. Marta Petrosillo dice que en Corea, «cualquier otra religión queda excluida. Se cree que en el país 10 mil personas conserven la Fe católica, en su mayoría, personas ancianas».
25% de los cristianos que quedaron en el país fueron internados en campos de concentración con trabajos forzados y en condiciones sub humanas y con torturas. Los que escaparon de eso se vieron obligados a vivir su Fe en la clandestinidad.
«Algunos de los que consiguieron huir de Corea del Norte todavía se acuerdan como, de noche, las señoras ancianas se sentaban en círculos y se ponían a rezar el rosario fingiendo contar semillas de poroto», comenta Marta Petrosillo que busca con su organización denunciar la situación en Corea del Norte como siendo una de las más dramáticas y menos conocidas. Una vez que el impresionante cierre del gobierno es un gran obstáculo para conocer la realidad de lo que sucede dentro de sus fronteras, comentó la activista. (JSG)
De la Redacción, con informaciones Rome Reports.
Deje su Comentario