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Ciudad de Ho Chi Minh (Martes, 15-07-2014, Gaudium Press) La población de Than Hai, en Vietnam, fue destacada por la agencia noticiosa católica Asia News como un ejemplo del crecimiento de la fe en el país y de los buenos frutos obtenidos en un apostolado centrado en las familias. Un funcionario de la administración oficial relató a la agencia que «la mayoría de habitantes de Than Hai es católica y estoy orgulloso de ello». La insólita declaración en un país comunista que persiguió activamente a la Iglesia y que aún impone restricciones a su actividad se debe a que los pobladores son «buenos católicos» y además son «buenos ciudadanos» que colaboran con buen ánimo y atienden las necesidades de los más pobres en su entorno rural.
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| La parroquia de Than Hai, en Vietnam, exhibe una notable vitalidad en la que participan activamente las familias. Fotos: VietCatholic. |
La parroquia fue fundada en 1955 y tiene actualmente 5936 fieles, quienes inicialmente llegaron al lugar huyendo de la violencia en otras regiones. A pesar del ateísmo promovido por el estado y las décadas de persecución, la población ha aportado 16 sacerdotes, nueve religiosos varones, 17 religiosas y 10 seminaristas a la Iglesia. Ésta, por su parte, continúa su trabajo en diversos ámbitos como el de la educación, en el que por lo menos tres mil niños de escasos recursos pueden tener acceso a la formación gracias a la parroquia.
La clave de esta exitosa pastoral es la gran importancia dada a las familias en esta parroquia, que hace parte de la Diócesis de Phan Thiet, al sur de Vietnam. Un padre de siete hijos explicó esto a los reporteros de Asia News. «Junto con mi esposa los hemos guiado en el amor de Jesús, siempre ayudándolos en sus necesidades materiales y espirituales. Ahora mi hijo mayor es un sacerdote», expresó con orgullo el creyente. El presbítero «está dedicado al servicio pastoral en una parroquia remota de la Diócesis de Phan Thiet. De esta manera los padres podemos ser una parte integral de la misión de la Iglesia».
La acción caritativa y de desarrollo también es parte fundamental de la vida de la comunidad católica, con proyectos en poblados de pescadores, programas de escolarización, prevención de enfermedades y promoción social, en especial en poblaciones juveniles. También se cuenta con una comisión pastoral parroquial encargada de servir a los niños necesitados, los pobres, enfermos, ancianos y abandonados.
Con información de Asia News.
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