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Ciudad de México (Martes, 15-07-2014, Gaudium Press) El Cardenal Secretario de Estado, Mons. Pietro Parolin, está participando del importante encuentro «Coloquio México-Santa Sede sobre movilidad y desarrollo», y en el marco de este seminario ha hablado en diferentes oportunidades.
De estos diálogos recogemos algunos apartes.
«La Iglesia siempre apoyará las políticas que van en la dirección del respeto a la dignidad de la persona y de sus derechos humanos fundamentales», ha expresado el purpurado.
El Secretario de Estado del Vaticano manifestó su agrado por la reciente reforma migratoria aprobada en México, que tiene valiosos apartes resaltando los derechos de los migrantes.
Asimismo el purpurado ha trasmitido la gratitud del Papa y de la Santa Sede con la Iglesia mexicana, por el «servicio» a favor «de las necesidades de los migrantes» a través de sus «numerosos centros de acogida». «Un servicio», ha afirmado, que representa la «la continuación de la acción del buen samaritano».
En conversación con los medios mexicanos, el Cardenal Parolin resaltó que hay una correspondencia recíproca en el binomio pobreza-inmigración, lo que representa un actual desafío. Otros graves asuntos que deben ser confrontados son «la disgregación de la familia, el éxodo de los niños que emigran solos», «la plaga de la corrupción y el tráfico de personas», así como la violencia «ligada al narcotráfico». En frente a todos estos difíciles problemas, el Secretario de Estado recordó las palabras del Papa, que llama a «no dejarse robar la esperanza».
Igualmente señaló que en el mundo globalizado, «ningún gobierno puede afrontar con éxito por sí solo, estos desafíos». Es preciso de «estrategias comunes» a nivel internacional, especialmente cuando «se trata de la promoción de la persona y de sus derechos».
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