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Filadelfia (Miércoles, 23-07-2014, Gaudium Press) El próximo año, del 22 al 27 de septiembre de 2015, se celebrará en Filadelfia, Estados Unidos, el 8º Encuentro Mundial de las Familias, una iniciativa promovida cada tres años por el Pontificio Consejo para la Familia que tiene por finalidad celebrar don de la Iglesia doméstica, que es la familia, y reflexionar en torno al importante papel de la familia en la sociedad.
Con motivo del encuentro, que tendrá por tema «El amor es nuestra misión: la familia plenamente viva», el Arzobispo de Filadelfia, Mons. Charles Chaput, anunció el pasado domingo 20 de julio que San Juan Pablo II -canonizado el pasado 27 de abril- y la santa italiana Gianna Beretta Molla, serán los patronos del Encuentro Mundial del próximo 2015.
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«San Juan Pablo II y Santa Gianna han sido escogidos como los dos dignos santos patronos para guiar todo en la preparación y participación de este evento internacional, ya que ellos encarnan plenamente la historia, misión y tema del Encuentro», expresó Mons. Chaput.
«San Juan Pablo y Gianna tenían un profundo y permanente compromiso por el fortalecimiento de la familia y sostenerla con el amor. Este evento histórico dará a miles alrededor del mundo la oportunidad para compartir el mismo compromiso de nuestros santos patronos», continuó el Arzobispo de Filadelfia.
Con motivo de este anuncio, Mons. Chaput también develó y bendijo un relicario con la sangre del santo Papa polaco, que permanecerá en la Catedral de Filadelfia para la veneración de los fieles y como preparación espiritual para el Encuentro Mundial.
El Encuentro Mundial de las Familias comenzó oficialmente en 1994 con el impulso de Juan Pablo II y la tutela del Pontificio Consejo para la Familia. Si misión es fortalecer a las familias del mundo, bajo la luz de las enseñanzas cristianas, y para animarlas a vivir la fe con alegría. Este evento se ha realizado en Río de Janeiro, Roma, Manila, Valencia, Ciudad de México y Milán.
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El Papa de la Vida y de la Familia
No es de extrañar que San Juan Pablo II haya sido escogido como uno de los patronos del próximo Encuentro Mundial de las Familias, no sólo por ser su principal promotor, sino porque durante todo su pontificado mostró una gran preocupación por la familia cristiana, así como por la defensa de la vida, incluso el mismo quiso que se le recordara especialmente por estos dos aspectos: «Él mismo dijo que querría ser recordado como el Papa del a Vida y de la Familia. Su magisterio realza el papel de la familia como el ambiente en donde el hombre crece humanamente y espiritualmente», destacó Mons. Slawomir Oder, postulador de la Causa de Canonización del Papa Polaco, en entrevista con Rome Reports.
El propio Juan Pablo II habló en repetidas ocasiones sobre la importancia que tiene la familia para la sociedad, tal como lo hizo durante el discurso que pronunció en la Plaza de San Pedro el 8 de octubre de 1994, cuanto tuvo lugar el 1º Encuentro Mundial de las Familias: «En efecto, tenemos la convicción de que la sociedad no puede prescindir de la institución familiar, por la sencilla razón de que nace en las familias y en ellas encuentra su consistencia».
En aquella ocasión, el Santo Papa también dijo: «En la Iglesia y en la sociedad ha llegado la hora de la familia, que está llamada a desempeñar un papel protagonista en la tarea de la nueva evangelización. Del interior de las familias, entregadas a la oración, al apostolado y a la vida eclesial, surgirán vocaciones auténticas no sólo para la formación de otras familias, sino también para la vida de consagración especial».
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Madre de familia que antepuso su sí a la vida
Gianna Beretta, quien nació en Magenta, provincia de Milán, Italia, por su parte es modelo de santidad para las madres de familia. Tuvo cuatro hijos y murió el 28 de abril de 1962, tras dar a luz a su cuarta hija, y por causa de un tumor en el útero. Gianna, a quien se le diagnosticó el tumor cuando apenas contaba con dos meses de embarazo y para el cual se requería una intervención quirúrgica, se confió a la Providencia y decidió retrasar la operación con tal de salvar la vida de su pequeña. «Si hay que decidir entre mi vida y la del niño, no dudéis, elegid la suya. Salvadlo», diría la santa italiana algunos días antes de su parto.
Por este testimonio de santidad Gianna fue beatificada en 1994 y luego canonizada en 2004 por el Papa Juan Pablo II. Es la patrona de las embarazadas, madres y niños por nacer.
Con información de National Catholic Register, Aciprensa y Rome Reports.
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