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Papa Francisco anima a los jóvenes asiáticos a la belleza y alegría de la santidad

Soesan (Lunes, 18-08-2014, Gaudium Press) La visita apostólica del Papa Francisco a Corea del Sur estuvo marcada por un evento de gran trascendencia para la Iglesia en el continente asiático: su participación en la VI Jornada de la Juventud Asiática, encuentro que definió la fecha del viaje papal y que se unió de manera especial a la memoria de los mártires. La Eucaristía de Clausura del evento, al cual asistieron delegaciones de jóvenes de todos los países del continente, se realizó el pasado 17 de agosto en el Castillo de Haemi, en Seosan, lugar donde se venera a 132 mártires cuya identidad se desconoce. El Papa llamó a los jóvenes a dar testimonio y estar atentos para conservar la «sensibilidad para la belleza de la santidad, para la alegría del Evangelio».

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El Santo Padre predica durante la Eucaristíad e Clausura de la VI Jornada de la Juventud Asiática en Corea del Sur. Foto: Joen Han / Republic of Korea.

Estos mártires anónimos, los ya canonizados y los recientemente beatificados por el Papa Francisco hacen parte del gran legado de fe del pueblo coreano que debe animar a las nuevas generaciones de creyentes. «Jóvenes de Asia, ustedes son los herederos de un gran testimonio, de una preciosa confesión de fe en Cristo. Él es la luz del mundo, la luz de nuestras vidas», predicó el Santo Padre a los jóvenes en su homilía. «Los mártires de Corea, y tantos otros incontables mártires de toda Asia, entregaron su cuerpo a sus perseguidores; a nosotros, en cambio, nos han entregado un testimonio perenne de que la luz de la verdad de Cristo disipa las tinieblas y el amor de Cristo triunfa glorioso».

La misión de los jóvenes asiáticos

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Altar mayor de la Eucaristía de Clasura del encuentro en el Castillo de Haemi, en Seosan, Corea del Sur. Foto: Joen Han / Republic of Korea.

El Papa Francisco explicó el sentido de la primera parte de lema de la Jornada de la Juventud Asiática: «Juventud de Asia, despierta», motivando a los jóvenes a un testimonio activo de la fe en todos los aspectos de su vida, manteniendo su identidad cultural iluminada y discernida a través de la fe. «Como jóvenes que no sólo viven en Asia, sino que son hijos e hijas de este gran continente, tienen el derecho y el deber de participar plenamente en la vida de su sociedad», declaró el Pontífice. «No tengan miedo de llevar la sabiduría de la fe a todos los ámbitos de la vida social».

El Santo Padre también reflexionó sobre el aporte de la vitalidad de la juventud puesta al servicio de Dios y perfeccionada por su amor: «Dejen que Cristo transforme su natural optimismo en esperanza cristiana, su energía en virtud moral, su buena voluntad en auténtico amor, que sabe sacrificarse». Esta disposición les permitirá, aseguró, superar las dificultades y «todo lo que amenaza la esperanza, la virtud y el amor en su vida y en su cultura. Así su juventud será un don para Jesús y para el mundo».

«Como jóvenes cristianos, ya sean trabajadores o estudiantes, hayan elegido una carrera o hayan respondido a la llamada al matrimonio, a la vida religiosa o al sacerdocio, no sólo forman parte del futuro de la Iglesia: son también una parte necesaria y apreciada del presente de la Iglesia», animó el Pontífice. «¡Son el presente de la Iglesia!» El Papa llamó los jóvenes a la unidad y la construcción de una Iglesia «más santa, más misionera y humilde» y a responder al clamor de los más necesitados.

El Papa Francisco concluyó reflexionando sobre el llamado del lema a despertar, verbo que se refiere a la responsabilidad de los jóvenes. «Es la obligación de estar vigilantes para no dejar que las seducciones, las tentaciones y los pecados propios o los de los otros emboten nuestra sensibilidad para la belleza de la santidad, para la alegría del Evangelio», explicó. El Pontífice instó a los jóvenes a llevar a los demás hacia la misericordia de Dios que ellos ya han recibido y los encomendó a la Santísima Virgen Para que con su ejemplo puedan recibir a Cristo , servirlo y llevarlo a los demás. «¡Juventud de Asia, levántate!», concluyó.

Con información de News.va.

 

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