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Santiago (Lunes, 01-09-2014, Gaudium Press) El pasado viernes 29 de agosto, el Arzobispo de Santiago, cardenal Ricardo Ezzati, bendijo la nueva sede de «Edudown», corporación que atiende gratuitamente a más de 300 niñas y niños que padecen síndrome de down, apoyándolos en su desarrollo integral con miras a una real inclusión en la sociedad.
A partir de agosto, esta organización benéfica con ya más de 13 años en el país suma a las sedes de San Bernardo y La Serena, una en la comuna de Providencia -centro de Santiago- para así dar mayor cobertura en sus servicios de reforzamiento y apoyo integral.
En el acto inaugural de la nuevo centro, el prelado dijo a los presentes: «El amor es más fuerte que todos los límites que podamos encontrar en el camino de la vida. Y porque justamente el amor es más fuerte, hay también iniciativas y personas detrás de esas iniciativas, que quieren decirle a nuestra sociedad, muchas veces centrada sobre intereses única y exclusivamente materiales, que hay algo más grande que el dinero, más grande que el progreso material, más grande que todas nuestras conquistas en el ámbito de la economía, y eso es la sonrisa de un niño, el alma de un niño, de una niña, que lo único que pide es que abramos el corazón y lo pongamos a disposición del crecimiento de su vida, que es un don».
En la ocasión, el obispo señaló que «educar no es solamente fruto de nuestra inteligencia, educar es fruto del corazón». Y agregó: «Lo que hace crecer a una persona y llegar a la estatura más alta de su dignidad es el amor que la rodea, el amor por el cual se le entrega todo lo que podemos entregarle y es ése amor lo que compensa también cada sacrificio, todo sacrificio».
Finalmente, el cardenal tuvo sentidas palabras de agradecimiento para los padres, educadores e impulsores de este proyecto: «Yo quisiera agradecer a quienes están en el corazón de esta iniciativa, porque de verdad aquí están desarrollando una tarea que es muy hermosa y que es la tarea que más nos acerca y nos asemeja a Dios, porque Dios es amor y quien ama es hijo de Dios».
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