Iglesia en Líbano aumenta sus trabajos en favor de refugiados de Siria e Irak

Beirut (Jueves, 04-09-2014, Gaudium Press) Una nueva campaña fue lanzada por Cáritas Líbano, la organización humanitaria oficial de la Iglesia Católica en ese país, para recaudar fondos que le permitan ampliar la atención a refugiados sirios, libaneses en condición de vulnerabilidad y cristianos perseguidos provenientes de Irak. El trabajo de la Iglesia es de particular importancia, ya que esta nación es receptora de un 40 por ciento de las personas que huyen de la vecina Siria y otros provenientes de países de la región como Irak.

Los niños se encuentran entre los principales beneficiarios de los programas de Cáritas Líbano. Foto: Cáritas internationalis.

«Estamos intentando ayudar a muchos refugiados sirios y libaneses vulnerables, que necesitan alimentos, asistencia médica, educación y otros servicios», explicó Najla Chahda, directora del Centro de Inmigrantes de Cáritas Líbano. El aumento del número de inmigrantes a causa de la violencia y la disminución de los fondos existentes para la atención social ha causado un impacto negativo en los servicios públicos y sociales de los cuales dependen también muchos nacionales vulnerables. Además de la atención a sirios y libaneses, Cáritas está «facilitando asistencia también a familias iraquíes cristianas. El reto es enorme y exige un importante compromiso internacional, en lo que se refiere a financiación y asistencia», agregó Chahda.

Las necesidades actuales imponen a Cáritas recaudar unos tres millones de dólares para programas que serán implementados en los próximos doce meses. Una de las prioridades de este presupuesto es atender las necesidades de educación de un gran número de niños sirios y libaneses. Los infantes cuentan con pocos cupos disponibles en las instituciones educativas y deben enfrentar situaciones familiares que dificultan su asistencia a la escuela, por lo que necesitan el apoyo de la Iglesia.

Otras ayudas de gran importancia incluyen alimentos, calefacción y costos de alquiler de vivienda para familias con escasos recursos en un país de alto costo de vida. También se entregan ayudas en dinero a trescientas familias iraquíes que llegaron a Líbano y que deben iniciar una nueva vida sin ningún tipo de pertenencias o recursos. Ellos también serán beneficiarios de asistencia médica y acompañamiento para la superación de sus experiencias traumáticas. «Los refugiados iraquíes cristianos llegan sollozando a nuestras oficinas, pidiendo ayuda porque lo han perdido todo, tras ser obligados a abandonar su tierra natal», relató Chahda.

Los programas de Cáritas Líbano, que benefician todo el territorio nacional, comenzarán en sus primeras fases en Trípoli, el monte Líbano, Beirut y sus suburbios, el sur y el valle de la Becá.

Con información de Cáritas Internationalis.