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Ciudad del Vaticano (Lunes, 15-09-2014, Gaudium Press) En las palabras previas a la oración del Ángelus, ayer en la Plaza de San Pedro, el Papa Francisco explicó ante los miles de fieles presentes el porqué la Iglesia exalta la Cruz de Jesús: es «porque en ella se ha revelado al máximo el amor de Dios por la humanidad».
«Es esto lo que nos recuerda el Evangelio de Juan en la liturgia del día: ‘Tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo Unigénito’ (3, 16). El Padre ha ‘dado’ al Hijo para salvarnos, y esto ha comportado la muerte de Jesús, y la muerte en la cruz», resaltó el Pontífice.
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| Foto: Radio Vaticano |
La Cruz, que era un terrible suplicio, es un signo «de la gravedad del mal que nos tenía esclavos. La Cruz de Jesús expresa ambas cosas: toda la fuerza negativa del mal, y toda la mansa omnipotencia de la misericordia de Dios».
La Cruz también es también signo de la victoria de Cristo: «La Cruz parece decretar el fracaso de Jesús, pero en realidad, marca su victoria. En el Calvario, los que se burlaban de Él le decían: ‘Si eres el Hijo de Dios, baja de la cruz’ (Cfr. Mt 27, 40). Pero era verdad lo contrario: precisamente porque era el Hijo de Dios Jesús estaba allí, en la cruz, fiel hasta el fin al designio del amor del Padre. Y precisamente por esto Dios ha ‘exaltado’ a Jesús (Fil 2,9), confiriéndole una realeza universal».
«Por medio de la Cruz de Cristo el maligno ha sido vencido, la muerte es derrotada, se nos ha dado la vida y se nos ha devuelto la esperanza. ¡Eh! Esto es importante. Por medio de la Cruz de Cristo se nos ha devuelto la esperanza», insistió el Papa.
Con los ojos puestos en el sagrado madero de la Cruz, el Papa Francisco invitó a pensar en «tantos hermanos y hermanas nuestros que son perseguidos y asesinados a causa de su fidelidad a Cristo», y convocó a rezar por ellos.
A la Virgen Dolorosa, el Pontífice encomendó el presente y futuro de la Iglesia.
Con información de Radio Vaticano
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