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Santiago (Jueves, 02-10-2014, Gaudium Press) El pasado lunes 29 de septiembre, el Seminario Pontifico de los Ángeles Custodios, ubicado en Santiago, cumplió 430 años de vida dedicados a la formación de los futuros sacerdotes, erigiéndose como una de las instituciones educacionales más antiguas de Chile. En la actualidad este centro de estudios pastorales alberga a 57 estudiantes más 11 diáconos en tránsito al sacerdocio.
En la ocasión, monseñor Fernando Ramos, Obispo Auxiliar de Santiago, presidiendo la Eucaristía de Aniversario, destacó al inicio de la celebración que «es una gran alegría celebrar los 430 años de nuestro Seminario». En este sentido, agregó que esta casa de formación es por lejos la institución educacional más antigua del país, ya que los primeros antecedentes que datan de su existencia se remontan al año 1585, cuando en una carta, fray Diego de Medellín le cuenta al Rey de España sobre el funcionamiento de un seminario a cargo del padre De León.
En su homilía, el obispo explicó que el seminario está dedicado a los santos ángeles custodios, ya que ellos son los encargados de acompañar en el camino de la fe y comunican el encargo de Dios. «Esto sintetiza la experiencia del Seminario, pues si no se tiene la intencionalidad de vivir en camino para ir descubriendo cuál es la voz del Señor aquí y ahora para las personas que se están formando, lo demás será inútil», dijo.
También agregó que se requiere una actitud fundamental que es la de Jesús en el Evangelio proclamado: «¿Quién es el más importante en el Reino de los cielos? Jesús asegura que los más importantes son los que tienen actitud de niño, los que tienen la actitud espiritual de dejarse conducir y aprender, de dejarse interpelar y transformar. Si falta esta actitud fundamental, el camino formativo queda abortado», sostuvo.
«El seminario es camino, es camino que hacen aquellos que tienen corazón de niño con un que nos regale esta experiencia para los jóvenes que se están formando y los que esperamos que se integre a este proceso formativo», concluyó.
Tras la Santa Misa, el padre Cristián Castro, Rector del Seminario, saludó afectuosamente a los presentes y los invitó a participar de un fraternal almuerzo.
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