Bogotá (Jueves, 23-07-2009, Gaudium Press) El sacerdote de origen italiano Javier de Nicoló, de la congregación de los Salesianos de San Juan Bosco, recibió ayer de parte del Presidente de la República, Álvaro Uribe Vélez, la orden de Boyacá, una de las máximas distinciones que imparte el Gobierno Nacional, destinada a las personas que gracias a su dedicación y esfuerzo, trabajan y construyen un mejor país.
El padre Javier de Nicoló nació en Bari, Italia en 1928. A la edad de 18 años y luego de terminada la Segunda Guerra Mundial, decide integrarse a la comunidad Salesiana, la cual es conocida por sus labor con los pobres y la juventud.
Llegó a Colombia en 1948, donde inició sus estudios en filosofía y teología, ordenándose en 1958. Estudió Matemáticas Modernas y metodología para la enseñanza de las Matemáticas en la Universidad Javeriana.
A sus 81 años de vida, de los cuales ha dedicado más de la mitad a servir a la juventud de Colombia, el padre de Nicoló visitó la casa de gobierno para recibir el reconocimiento a sus labores evangelizadoras.
La Orden de Boyacá, en el grado de Comendador, fue otorgada mediante el Decreto 856 del Ministerio de Relaciones Exteriores, el cual destaca que el religioso «ha consagrado su vida de 50 años de apostolado al trabajo inalcanzable, abnegado y al bienestar de los más necesitados, logrando con ello obras como el proyecto social Bosconia, que ha beneficiado a más de 60 mil niños, niñas y jóvenes en situación de extrema vulnerabilidad«.
La ordenanza destaca la disposición y trabajo decisivo y honesto en pro de la juventud colombiana, que el sacerdote ha desarrollado a lo largo de estos años, con el único objetivo de buscar un país más justo y equitativo para todos.
El Presidente Uribe destacó el orgullo que sienten los colombianos al contar con el clérigo salesiano: «nos sentimos muy orgullosos de que Colombia haya podido contar y cuente con el padre Javier de Nicoló en los programas de extensión de este Gobierno; en la ampliación de todo lo que ha sido nuestra cobertura a través del Sistema de Educación Nacional de Aprendizaje (SENA), ha sido también un componente fundamental», indicó el Mandatario.
Al finalizar el acto, el padre de Nicoló agradeció la distinción y se comprometió a seguir trabajando a favor de la educación de los niños y jóvenes: «agradezco al Presidente Uribe por permitirme recibir esta condecoración, pero más que un reconocimiento al padre Javier, hay que reconocer el método. Tenemos un método a través del cual, en menos de dos años, el joven sale de sus limitaciones, se capacita y se vuelve idóneo para trabajos sencillos«, manifestó el sacerdote.
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