"Busquemos ser misioneros en el ambiente donde estamos", dice obispo de Santa Cruz del Sur, Brasil

Santa Cruz del Sur (Lunes, 27-10-2014, Gaudium Press) «Iglesia Misionera» es el título del más reciente artículo de Mons. Canísio Klaus, Obispo de la Diócesis de Santa Cruz del Sur, en el estado de Río Grande del Sur, Brasil, donde recuerda que para la Iglesia Católica octubre es el mes de las misiones. Por eso, según el Prelado, a lo largo del mes, las comunidades son invitadas a reflexionar sobre su actividad misionera, renovando su compromiso evangelizador y uniéndose en oración por las misiones.

Foto: caritas.org.br

Mons. Canísio recuerda que en el Concilio Vaticano II se afirmó que «toda la Iglesia es misionera y la obra de la evangelización es un deber fundamental del Pueblo de Dios» (Ad Gentes, 35). Y, por ello, en el Plan de Pastoral de la Diócesis de Santa Cruz del Sur, haciendo eco a los documentos de la iglesia, se afirma que «la misión forma parte de la esencia de la Iglesia, una vez que ella existe para evangelizar».

Para el Obispo, la palabra misión normalmente es entendida como una tarea que va más allá de la frontera de la comunidad, y es así hay misioneros brasileños que están actuando en África y Asia y misioneros de Río Grande del Sur que están actuando en la región Amazónica.

«Varios de los padres que están trabajando en nuestras parroquias tuvieron la experiencia de un trabajo misionero en las iglesias hermanas de Diamantino y Sinop. Aún hoy, es significativo el número de hermanas y padres de la región que están en campos de misión en África, América Central, Asia y Amazonía. Yo mismo tuve la gracia de actuar como misionero en Mato Grosso, donde vino la inspiración para mi lema episcopal: ‘Enviado para Evangelizar'», resalta.

Además, Mons. Canísio enfatiza que en el Plan de Pastoral de la Diócesis gaucha se establece que para ser misionero no es preciso dejar su tierra, porque «la misión comienza en casa, en su lugar, en su comunidad, en su familia, en su trabajo. Cada cristiano, por el bautismo, recibe de Cristo el llamado a ser misionero, a comenzar por sí, su casa, su comunidad, y hasta los confines del mundo».

Él también cita al Papa Pablo VI, que al hablar sobre la misión de la familia afirmó: «En el seno de la familia, todos los miembros evangelizan y son evangelizados. Los padres, no solamente comunican a los hijos el Evangelio, sino que pueden recibir de ellos el mismo Evangelio profundamente vivido. Y una familia así se torna evangelizadora de muchas otras familias y del medio ambiente en que ella se inserta» (EN n. 71) En el mismo documento, Pablo VI dijo que «es necesario que los jóvenes, bien formados en la fe y la oración, se tornen cada vez más los apóstoles de la juventud» (EN n.72).

Para finalizar, el Prelado invita a aprovechar el final del mes de octubre para afirmar el compromiso misionero, buscando ser misioneros en el ambiente donde estamos, comenzando por nuestra familia. Él hace también una alerta para que no olvidemos la misión «para afuera», «en la cual son llamados a participar todos los miembros de la Iglesia, pues esta es, por su naturaleza, misionera» (Papa Francisco).

Mons. Canísio pide a Dios que bendiga a los misioneros que están lejos de su tierra y nos fortalezca a todos en el compromiso misionero. «Y, a pedido de nuestro Papa elevemos nuestra oración, para que la Iglesia se torne una casa para muchos, una madre para todos los pueblos y posibilite el nacimiento de un mundo nuevo», concluye. (FB)